Hablar de ariete y colombiano, hace que a la parroquia del Vicente Calderón el primer nombre que se le pase por la cabeza sea el de Radamel Falcao. Quizá el próximo verano puede que lo asocien a Carlos Bacca, delantero cafetero del Sevilla que ha despertado un gran interés en el Atlético de Madrid. Ya durante el pasado verano, su nombre sonó con fuerza para sustituir a David Villa y a Diego Costa al firmar 14 goles en su primera temporada en la Liga. Está temporada va camino de superar esa cifra, al llevar cuatro tantos en cinco jornadas, por lo que más de uno apunta que será el gran objetivo rojiblanco de cara a la próxima campaña y que el partido del Vicente Calderón será su particular examen para medir sus cualidades.

Bacca tiene 28 años, y a pesar del momento dulce por el que está atravesando no lo tuvo nada fácil hasta llegar a la élite. En sus inicios, llegó a compaginar la conducción de autobuses con la práctica del fútbol. Pero como su sueño era dedicarse únicamente al balompié decidió hacer las maletas rumbo a Venezuela a probar fortuna. Allí jugó en un equipo que jugaba en la Segunda división con el que se salió, lo que le valió ganarse un billete de vuelta a un equipo de Colombia pero en la categoría de plata. Una vez más, a base de goles volvió a firmar una gran campaña lo que provocó que varios equipos de primera se interesaran en él.

Finalmente fichó por Junior de Barranquilla equipo en el que siempre había querido jugar. Allí estaría tres campañas en las que despertó el interés de equipos europeos, siendo el más rápido en hacerse con sus servicios el Brujas belga. Allí estaría dos temporadas, donde tras una primera campaña irregular en la segunda terminaría de explotar con 25 goles en 35 partidos lo que provocó que el Sevilla le fichara la temporada pasada.

Bacca puede jugar como única referencia arriba como también de segunda punta. Incluso en algunos partidos se ha escorado hacia la izquierda al coincidir en el terreno de juego con el otro punta sevillista, Kevin Gameiro. Otra característica del ariete cafetero es que siempre juega al límite de la línea defensiva, lo que provoca que muchas veces caiga en el fuera de juego. Bacca además de buen tiro tiene una buena conducción de balón y capacidad para dar el último pase.

Todas estas características le han valido para que despierte el Interés del Atleti, por lo que en el Vicente Calderón vivirá su particular examen de cara a la que puede ser su afición la próxima campaña. 

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Sobre el autor
Juan Heralta
Periodista. Técnico superior en Producción de Audiovisuales,Radio y espectáculos .Emprendedor.Si no lo intentas jamás lo conseguirás ;)