La decisión de Xavi Hernández de dejar la selección española tras el Mundial de Brasil fue uno de los indicadores del cambio de ciclo. Vicente del Bosque continuó al mando del combinado nacional y tuvo claro desde un inicio que Koke era el hombre que debía de sustituir al centrocampista por excelencia de la Roja. El futbolista vallecano ya busca adaptarse a su nuevo rol, muy diferente al del Atlético de Madrid.

Jorge Resurrección ha desarrollado la parte más exitosa de su carrera como mediapunta o interior. Su calidad en el toque, excelente visión del último pase y pegada desde lejos hacen de él un hombre talentoso y que tiene que vivir cerca del área rival para asistir y aprovechar las segundas jugadas. Simeone apostó por él ahí tras su regreso al Vicente Calderón y el jugador ya se ha acomodado a jugar en ambas bandas apoyando a los centrocampistas.

Pese a su juventud (22 años), ya es uno de los pilares de España. Tiene el difícil papel de sustituir a uno de los jugadores más importantes del país y el director del equipo que ganó la Eurocopa en dos ocasión y el Mundial en otra. Del Bosque tiene claro que Koke es su hombre a pesar de que tenga que adaptarse a un nuevo rol y él está respondiendo con ilusión y trabajo, aportando cosas nuevas y buscando llegar a las que ya había.

Koke aporta más sacrificio defensivo, pero tiene que ser más protagonista en ataque

En la última convocatoria (partidos contra Eslovaquia y Luxemburgo de clasificación para la Eurocopa de 2016) ha disputado los 180 minutos el centrocampista rojiblanco. Es la muestra más clara de que el técnico tiene toda la confianza en él y que quiere que acumule minutos para seguir creciendo. Busquets, Iniesta y Silva han acompañado al vallecano en la medular, ocupando éste una posición de mediocentro puro, con menos llegada de lo habitual, mucho trabajo de recuperación y cediendo el protagonismo al manchego y al canario en la parcela ofensiva.

Koke fue el tercer español que más balones recuperó entre ambos choques (5), además de que taponó res disparos. Fue casi una pareja para Sergio, siempre quedando el culé como último hombre. El atlético aporta más oficio defensivo que Xavi y ayuda más en la salida de balón así como en los pases largos, pero todavía le falta dar un paso al frente en responsabilidad a la hora de llevar la pelota hasta arriba y dar asistencias. Aun así, fue el autor de la asistencia que permitió a Silva marcar tras la dejada de cabeza de Costa y ejecutó la falta que terminó en gol de Diego tras jugada de estrategia.

Jorge Resurrección sigue adquiriendo galones en la selección española y tiene la confianza de todos. A base de talento y trabajo está logrando cubrir el puesto de Xavi, apoyar en tareas defensivas y ofrecer variantes. Los minutos sirven para que continúe en su adaptación y cada vez tenga más influencia en el juego. Koke se gana día a día un puesto en el centro del campo. El sustituto del directo de juego ya tiene nombre.