A Simeone no le parece suficiente lo que Antoine Griezmann ha aportado al equipo desde su fichaje procedente de la Real Sociedad. Y no porque el francés negocie el esfuerzo que demanda el argentino en las tareas defensivas o porque peque de ser poco influyente a la hora de generar el juego. Nada de eso. ‘El Cholo’ ha basado sus últimas ruedas de prensa previas a los partidos en lanzar contundentes mensajes para picar al de Maçon con el objetivo de exigirle una marcha más en su juego. Quiere que Griezmann pase de ser un niño a un hombre. Y cuanto antes.

“Llevará un tiempo de trabajo pero hay una gran predisposición. Esperamos que el joven jugador importante que es empiece a ser un hombre futbolista importante también”, advirtió Diego Pablo Simeone sobre el francés, que ha jugado todos los partidos que el Atlético de Madrid ha disputado a lo largo de la presente temporada, aunque no ha completado los noventa minutos en ninguno de los quince partidos (10 de Liga, 3 de Champions League y dos de Supercopa de España) de competición oficial.

La relación que mantiene el jugador con el técnico es de un constante amor-odio que goza de más filias que de fobias. Simeone comprende que con 23 años, y a pesar de ser ya internacional indiscutible en las convocatorias de Didier Deschamps, es aún muy joven y que el salto de la Real Sociedad a un equipo como el Atlético de Madrid es gigante en cuanto a la exigencia. En Griezmann, Simeone encuentra un diamante, aún por pulir. Y a diferencia de otros jóvenes, como Óliver Torres, el argentino está dispuesto a aceptar el reto, treinta millones mediante. “Está de acuerdo en entregarse para seguir creciendo y necesitamos explotar todas sus características”, añade el técnico.

Doblete en Liga como rojiblanco

Griezmann no solo afronta el gigantesco salto de responsabilidades, sino también un cambio de posición con respecto al puesto que ocupó en su mejor temporada a nivel profesional. El preparador argentino ve que sus cualidades merecen ser explotadas más por dentro en vez de por fuera, donde jugó el curso pasado con la Real Sociedad. Partido a partido, y nunca mejor dicho en la filosofía ‘Cholista’, Griezmann se acerca con mayor frecuencia al arco del rival. Y por primera vez desde su fichaje, marca en Liga con la camiseta del Atlético de Madrid. Y a pares.

Contra el Córdoba puso por delante a los rojiblancos en la primera parte y marcó el segundo instantes después de la diana de Ghilas que hacía el empate. El francés se rebelaba y se estrenaba como goleador colchonero. Además lograba romper una mala racha que acumulaba de trece partidos de Liga sin ver portería. Y es que desde que marcara al Celta en la jornada 33 de la pasada temporada, Griezmann no veía portería en el campeonato doméstico.

Tres meses después de su fichaje por el Atlético de Madrid, Griezmann suma cuatro dianas en 15 partidos como rojiblanco. Dos en Champions League (contra el Malmö y contra el Olympiacos) y otras dos en Liga (ambas contra el Córdoba). Y la sensación de que la mejor versión de Griezmann vista en San Sebastián se va a quedar muy lejos del rendimiento que puede ofrecer el francés en el futuro con la camiseta del Atlético de Madrid.

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Sobre el autor
Víctor Molina Pozo
Madrid. Redactor del Atlético de Madrid B. Hasta junio de 2015 fui Moderador de contenidos de VAVEL. También Coordinador y redactor del Atlético de Madrid. Gestioné la cuenta @Atleti_VAVEL. E-mail de contacto: [email protected]