Volvía la liga al Vicente Calderón tras el parón obligado por las selecciones nacionales, con la baja de Miranda en defensa y la mirada atrás por la ultima derrota en Anoeta, pero no era tiempo de mirar al pasado, si no de comenzar y seguir sumando en su estadio arropado por los más de 44.000 personas que abarrotaban el graderío a orillas del Manzanares.

MOYÁ; ANSALDI, GIMÉNEZ, GODÍN, JUANFRAN; GABI, TIAGO; ARDA, KOKE, GRIEZMANN y MANDZUKIC, este era el once decidido por Diego Pablo Simeone para afrontar el duelo ante el Málaga C.F.

Inició la primera mitad el Atlético de Madrid como de costumbre: atacando. Lo intentaban los rojiblancos apareciendo desde las bandas y pudo llegar el primer tanto en los primeros minutos si Mandzukic hubiese llegado a un buen centro de Ansaldi.

Una buena jugada desde la banda derecha de Juanfran puso un balón al área que dejó pasar Arda, lo que sirvió a Koke para disparar a puerta, si bien el balón golpeó en la defensa blanquiazul. La grada del Calderón pedía penalti, algo que no lo consideró el colegiado.

El córner botado por el '6' rojiblanco al primer palo hizo que apareciese una vez más el 'Atlético Aviación' y así, Tiago se adelantó a su marcaje y se alzó más que ninguno al cielo de Madrid para batir a Kameni. Era el minuto 12 de la primera mitad.

Seguía empeñado el equipo de Simeone en conseguir el segundo tanto y lo pretendía por las bandas. En línea tres cuartos se volcaba el juego del Atlético, tocando y mimando la pelota. Una buena jugada de Mandzukic, Griezmann y Ansaldi terminó en un despeje de la defensa. El Atleti jugaba a lo que quería.

Intentaba tocar el conjunto andaluz en el centro del campo para dar salida al balón, pero la presión rojiblanca les hacía recular cosa que aprovechaba el Atlético de Madrid para ganar metros de cara a puerta.

Sí lo hizo el Atleti en el minuto 42. Una pared protagonizada por Arda Turan y Mandzukic en banda derecha sirvió en bandeja el segundo tanto de la tarde para que El Principito Griezmann no dejase escapar el pase de la muerte del turco y marcarse a placer.

Tras el gol, hora para el bocata y como no, en el Vicente Calderón esa tradición futbolera y familiar que pasa de abuelos a nietos.

Segunda mitad:

Con un va y ven de ocasiones comenzaba la segunda mitad, se dormía el Atleti consecuencia de sus dos goles y se hacía grande un Málaga sin posibilidades.

El partido se convirtió en un ir y venir de ataques, si bien la ocasión más clara fue del Atlético de Madrid, con un centro chut de Ansaldi que no encontró ni compañero ni portería.

Tras el gol del Málaga se escuchaba el murmullo de la grada y un Atleti volcado a puerta que no conseguía meter entre los tres palos, pero ahí llegó Koke. Tras poner un balón al área, que Kameni despejó como pudo se quedó la bola muerta y Tiago recuperaba para ponerla en la testa de Godín al segundo palo, quien consiguió sentenciar el partido. Apareció como un auténtico rayo dentro del área andaluz para hacer el 3-1 definitivo.

Llegó la venganza del partido que el año pasado impidió a Simeone ser campeón en su casa y le obligó a hacerlo una semana después. 26 partidos sin perder lleva el Atleti en casa en Liga. Ahora, a pensar en el Olympiacos.