En los últimos catorce años el Atlético de Madrid ha participado en cuatro ediciones de la UEFA Champions League. Tras regresar del infierno, el conjunto colchonero deambuló por la mitad de la tabla durante varias temporadas, intercalándolo con alguna participación en la mítica Copa Intertoto e incluso ganando la moderna Europa League en dos ocasiones. Pero lo importante en Europa es la Champions League y el conjunto colchonero solo ha estado a la altura en las dos últimas ediciones y para muestra una estadística: ocho partidos consecutivos sin conocer la derrota en el Vicente Calderón.

En los últimos ocho partidos en el Vicente Calderón, el Atlético ha encajado dos goles.

Setecientos veinte minutos sin salir derrotados en el Impenetrable no es ni mucho menos una simple estadística de las muchas que aparecen a lo largo de la temporada. En la última década, el Atlético de Kun Agüero, Forlán y compañía participó también en dos ediciones de Champions League. En la temporada 2008/2009 en el feudo colchonero se lograron dos victorias y dos empates en la breve participación del equipo antes de ser eliminados por el Oporto en Octavos. Invictos gracias a los goles de Kun, Raúl García, Simao, Maxi o Forlán. Como han cambiado las cosas desde entonces.

Más desastrosa fue la siguiente edición en la que el Atlético participó sin poder pasar ni tan siquiera la fase de grupos, hecho que a la larga propició que los atléticos levantaran la Europa League meses después. En esta ocasión, en ninguno de los tres partidos disputados en el Vicente Calderón pudieron lograr la victoria. Empate sin goles ante el Apoel, empate (2-2) ante el Chelsea con doblete del Kun y dolorosa derrota (0-3) ante el Oporto. El Atlético no se ganó el respeto y lo de volver a ser grande tendría que esperar unos años más.

Ocho partidos consecutivos sin perder en el Vicente Calderón

Cuatro años después del descalabro en Champions League que acabó con la alegría de Hamburgo, el Atlético de Madrid regresó a la máxima competición europea, pero esta vez de la mano del venerado Diego Pablo Simeone. Los rojiblancos comenzaron a hacer del Vicente Calderón un territorio temido por los jefes de Europa. Pasaron por la Ribera del Manzanares los fríos rusos del Zenit, los más tranquilos austriacos del Austria de Viena, los vecinos portugueses de Oporto, los elegantes italianos de Milan, los mejores del mundo vestidos con la camiseta del Barcelona y hasta el temido Mourinho y su Chelsea. Ninguno de ellos consiguió arañar una victoria del Impenetrable. El Atlético se ganaba el respeto de sus rivales y a punto estuvo de obtenerlo del mundo entero si no hubiese sido por ese fatídico minuto noventa y tres.

El Chelsea fue el único equipo en conseguir un empate en el Vicente Calderón.

Lo complicado no es llegar y si mantenerse, pero el Atlético sigue escalando posiciones entre los mejores equipos europeos. En la actual edición de Champions League, los colchoneros han vencido en las dos ocasiones que han recibido en su campo a sus compañeros de grupo. Juventus y Malmö ya saben lo que es irse con las manos vacías de Madrid y ahora es el turno para que el Olympiakos intente romper la espectacular racha que capitanea Simeone. Ocho partidos sin perder en el Manzaneras, el miércoles pueden ser nueve. Que la racha continúe.