No hay argumento que valga, decía José Ortega y Gasset, para tratar con los testarudos. Y tanto el Atlético de Madrid como Diego Pablo Simeone lo son. Con mucho orgullo. Cuesta, hasta tal punto que es imposible, conseguir bajar al técnico argentino de su discurso, el de ir partido a partido, de tentarlo con relacionar a su equipo con el FC Barcelona y el Real Madrid en la misión de pelear por la Liga este año. ‘El Cholo’ insiste que su Liga es la que le obliga a competir con Valencia y Sevilla. “Deseo que alguien pinche en el partido del Barça porque juega el Sevilla”, contestó, muy torero, el argentino el sábado pasado sobre si vería los partidos de Madrid y Barcelona deseando que alguno pinche.

Existe la creencia en el vestuario del Atlético de Madrid que el equipo está creciendo con el paso de los días y de las jornadas. El primero en apuntar esta mejoría tanto en el juego como en el físico y en la actitud fue Tiago el día antes de enfrentarse al Olympiacos. Tras el partido fue Raúl García el siguiente en señalar que el Atlético aún no ha mostrado su mejor versión. "Como equipo, creo que el techo aún no lo hemos alcanzado”, señaló el navarro el día que igualó a Adelardo como rojiblanco con más partidos en competición europea.

Contra el Olympiacos, el Atlético de Madrid recuperó ciertos automatismos que exhibió la temporada pasada. Tuvo pegada (cuatro goles en seis remates a portería) y aplicó la intensidad y la presión desde el arranque del partido. Demasiado Atlético para un cándido Olympiacos. A pesar de desplegar un juego más vistoso que el realizado, por ejemplo, contra el Málaga, los colchoneros anotaron dos de las cuatro dianas de cabeza. Es la tónica general que marca el acierto goleador esta temporada del Atlético de Madrid.

Más de la mitad de los goles (14 goles de 23 en total) que el Atlético de Madrid ha marcado en las doce jornadas de Liga han llegado de remates de cabeza. El conjunto rojiblanco obtiene la victoria a cabezazos. Lejos de despreciar el acierto rematador del equipo de Diego Pablo Simeone, es conveniente elogiar el resultado de unos ejercicios trabajados durante el periplo del técnico argentino en el banquillo del Manzanares. El 61% de los goles rojiblancos en el campeonato doméstico se han anotado de cabeza. Y apunta a récord. En el primer tercio de Liga, el Atlético lleva cuatro goles de cabeza menos que los conseguidos la temporada que ganó el título liguero.