Tras comparecer Enrique Cerezo en rueda de prensa junto a Tino Fernández, presidente del Deportivo de la Coruña, ha sido Gil Marín, consejero delegado del Atlético de Madrid, quien ha querido manifestarse a colación de la reyerta acontecida en los aledaños del Vicente Calderón que ha tenido como resultado el fallecimiento de Jimmy, un ultra de los Riazor Blues, y la detención de, al menos, 14 personas relacionados con la pelea en Madrid Rio a dos horas de la celebración del encuentro.

Gil Marín ha querido desmarcar a la institución rojiblanca del Frente Atlético, negando que existan favores o consideraciones hacia la hinchada radical. "Yo no soy quien para disolver el Frente. Entre esos cuatro mil siempre te encuentras algún hijo de puta", argumentó el consejero delegado del Atlético de Madrid en declaraciones a los compañeros de la Cadena COPE.

"Ni dinero, ni entradas, ni nada. No les facilitamos nada. Este año hemos quitado el abono a otros 46", explico Gil Marín para ejemplificar ante los medios de comunicación el trato que el Atlético de Madrid da al Frente Atlético en el estadio Vicente Calderón.  Este tipo de delincuentes y de asesinos se refugian en la masa y aprovechan cualquier manifestación para aparecer. Lo que tienen en su cabeza es porquería”, añadió.

Gil Marín ha desvelado que existen trece radicales vetados de por vida en el Calderón por incidentes de menor gravedad. “Los que hayan sido no solo no tienen que estar en el Calderón, sino que deben estar en la cárcel.  El tema es qué y cómo determinar quién está detrás de todo esto. Tengo amigos que tienen a sus hijos en el Fondo Sur y también son gente sana”, argumentó.

“"Estoy dolido y repugnado. Habíamos trabajado mucho para que ésto no pasara. Se me cae el alma a los pies", finalizó Gil Marín sobre la reyerta protagonizada por el Frente Atlético, que tiene un cuarto exclusivo en los interiores del Vicente Calderón donde guardan diferente material