Pese a que en el fútbol moderno los jugadores van y vienen de un equipo a otro y en contadas ocasiones sienten fidelidad y amor verdadero hacia el escudo que portan en el pecho, siempre hay excepciones que rompen la regla. En la actualidad podríamos destacar a Totti y la Roma, Buffon y la Juventus, Gerrard y el Liverpool....jugadores que pese a haber recibido una enorme cantidad de ofertas han decidido pasar toda o la gran mayoría de su carrera deportiva en el equipo al que han amado. Esa fidelidad no se compra con dinero y es muy difícil de conseguir hoy en día y por ello es emocionante que sigan habiendo casos así.

Leyenda del Atlético de Madrid

Hay nombres que automáticamente los pronuncias, aparece un escudo o una camiseta junto al rostro del jugador. Es inevitable hacer estas conexiones y eso es lo bonito del fútbol, que va más allá del césped o la grada, va al corazón. Este es el caso de Luis Aragonés, un hombre que siempre será leyenda viva del Atlético de Madrid. 'Zapatones', como le llamaban algunos, vistió los colores de muchos equipos a lo largo de su carrera tanto en el césped como en los banquillos pero siempre hubo unos colores que llevó grabados a fuego, los rojiblancos del Atleti.

Ser el emblema de un club con más de 111 años de historia no es nada fácil, más bien es todo un orgullo. Es muy difícil conseguir el respeto y la admiración de todo el mundo del fútbol: jugadores, técnicos, directivos, presidentes, aficiones...pero Luis lo consiguió y siempre será recordado como uno de los grandes de la historia del fútbol español en general y del Atlético de Madrid en particular.

El que más partidos ha entrenado y ganado

'El sabio de Hortaleza', su apodo más extendido, es el entrenador que más veces ha dirigido y más victorias ha conseguido en la centenaria historia del Atleti. Hasta en 611 ocasiones se sentó en banquillo para dirigir a los colchoneros, con los que consiguió un total de 307 victorias. Unos registros impresionantes que demuestran el amor y fidelidad de Luis Aragonés hacia el Atlético Madrid, un amor mutuo con el que se forjó un vínculo y una historia maravillosa. Esos números también le convierten en el entrenador que más veces ha dirigido al Atleti en Liga con un total de 407 partidos. Lejos, muy lejos, de esas cifras quedan otros ilustres que se sentaron en banquillo rojiblanco como Zamora, Antic o el propio Simeone con 164, 144 y 118 respectivamente.

Se estrena en los banquillos con éxito

Su carrera como entrenador la inició precisamente en el banquillo del Calderón en 1974, esa misma temporada pasó de ser jugador a ser entrenador del equipo inmediatamente. Sustituyó a Juan Carlos Lorenzo en la jornada 10 del campeonato nacional de Liga y esa misma temporada consiguió su primer título como entrenador tras ganar la Intercontinental por 2-0 frente Club Atlético Independiente de Argentina. Ese trofeo es hasta la fecha el único que ha conseguido el Atlético de Madrid en toda su historia, ya que a él solo tienen acceso los campeones de la Champions League y en esa ocasión el Atleti disputó el partido porque el Bayern de Munich no podía hacerlo.

Esta primera etapa de Luis Aragonés a los mandos de su querido Atleti fue la más larga de las cuatro en las que estuvo. Dirigió al equipo entre 1974 y 1980, logrando una Copa del Rey en 1976 y una Liga en 1977, la única que conseguiría en su carrera como entrenador. Los malos resultados en la temporada 79-80 provocaron su destitución y se marchó al Betis, donde su etapa fue efímera y volvió al conjunto colchonero en la temporada 81-82.

Se va pero siempre vuelve

En esta segunda aventura a los mandos de la plantilla rojiblanca, Luis estuvo hasta 1987. En dicho periodo de tiempo conquistó una nueva Copa del Rey y una Supercopa de España, la primera que conseguía el Atlético de Madrid. Una vez fuera del club, pasó por el Barcelona, con el que consiguió otra Copa del Rey, y el Espanyol para volver de nuevo al Manzanares en 1991.

Esta nueva andadura, la tercera, fue más efímera y apenas estuvo hasta 1993. Su gran éxito esta vez fue conseguir la Copa del Rey en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid por 0-2 con goles de Futre y Schuster en un partido de los más recordados por los aficionados rojiblancos. El inolvidable discurso motivador que dio aquel día a sus hombres antes de saltar al césped forma parte de la historia del club. Refiriéndose a la pizarra de tácticas dijo "¿Lo han entendido?, ¿sí?. Pues esto , esto, no vale para nada. Lo que vale es que sois mejores y estoy hasta los huevos de perder con estos, de perder en este campo. Lo que vale es que sois el Atlético de Madrid y hay 50.000 ahí dentro que van a morir por vosotros. Hay que morir por ellos, por la camiseta, por vuestro orgullo. Hay que salir y decir en el campo que solo hay un campeón y va de rojo y blanco. Hay que salir y ganar, y ganar, y ganar, y ganar".

Rescata al Atleti del 'infierno'

Tras una nueva salida del club, esta vez pasaron ocho años hasta que volviera a la que siempre fue y será su casa. Pasó por varios equipos: Sevilla, Valencia, Betis, Oviedo y Mallorca. Y volvió al Atleti en uno de los momentos más duros de su historia, con el equipo en Segunda División. 'El Sabio de Hortaleza' consiguió ascender al equipo y estuvo un par de temporadas hasta que se fuera definitivamente en 2003 para no volver más, aunque su corazón siempre estuvo allí. Posteriormente se marchó al Mallorca, consiguió el éxito de ganar la Eurocopa de 2008 con la Selección Española y se marchó al Fenerbahçe turco, ultimo equipo al que entrenó.

Con esta maravillosa trayectoria como entrenador, unida a la que ya tuvo como jugador, Luis Aragonés se ha convertido en el gran símbolo del Atlético de Madrid, la figura más importante que ha tenido el club en su historia. Con los años, posiblemente Fernando Torres y Simeone también estén en un lugar de privilegio en los corazones de todos los colchoneros, pero nunca podrán borrar la enorme huella que en ellos dejó el eterno '8' rojiblanco.

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