Intenta Diego Pablo Simeone, recientemente, minimizar el impacto del cansancio acumulado que sufre el vestuario y las consecuencias que ha generado el Atlético de Madrid con las tres últimas jornadas, donde ha empatado en dos ocasiones y ha caído en otra, imposibilitando certificar la tercera plaza que otorga acceso directo a la fase de grupos de la Champions League. “Nuestra realidad es jugar el torneo interno con Valencia y Sevilla. Y está complicado porque cualquiera de los que salga habrá hecho una temporada fantástica. Estamos vivos y seguimos compitiendo muy bien”, argumentó tras la derrota contra el Barcelona.

El bonaerense viene recalcando durante el último mes que siguen dependiendo de sí mismos y que están en una situación que hubieran firmado con los ojos cerrados si se les presenta a principio de la temporada. Los colchoneros, que pudieron cerrar el tercer puesto con un triunfo contra el Athletic de Bilbao en el Vicente Calderón si Jaime Latre no hubiese perpetrado un robo a gran escala a plena luz del día, no han hecho aún los deberes tras sumar únicamente tres triunfos en los últimos siete encuentros ligueros.

El Atleti pudo cerrar la tercera plaza contra el Athletic en la jornada 35...y lo intentará a domicilio en la última jornada.

Solo la irregularidad en los resultados del Valencia, que no ha tenido grandes esfuerzos al caer pronto en la Copa del Rey y no jugar competición europea por su octavo puesto en el último curso liguero, en la recta final con tres empates en los últimos cuatro partidos han facilitado que el Atlético de Madrid no se haya caído del pedestal de la Liga y afronte la última con la seguridad de que un empate contra el Granada en el Nuevo Los Cármenes es suficiente para cumplir los objetivos marcados.

Como proclamara el rey agíada de Esparta Leónidas a su ejército de 300 espartanos antes de la batalla por la defensa de las Termópilas ante el avance de las huestes de Jerjes, el Atlético de Madrid merendará el próximo sábado a partir de las 18.30 horas en el infierno. Los colchoneros se desplazan hasta la ciudad que presume de cultura con El Albaicín, el Sacromonte y la Alhambra con el objetivo de sumar obligatoriamente un único punto contra el Granada CF para cerrar definitivamente el ansiado tercer puesto con el que tantas semanas lleva suspirando ‘el Cholo’ y sus jugadores.

Con nueve puntos de los últimos nueve posibles, Jose Ramón Sandoval ha conseguido el efecto deseado por Quique Pina y ha logrado que el Granada dependa de sí mismo en la última jornada. El pleno de puntos con el extécnico de Rayo Vallecano y Sporting de Gijón, entre otros, hace que los nazaríes meta dos puntos de distancia al Eibar y al Almería, equipos que en la actualidad están afincados en los puestos de descenso directo a la Segunda División.

El Valencia se apunta a la merienda

Tres puntos por detrás con respecto al Atlético pero con el 'golaveraje' particular a su favor, el Valencia también acudirá a la misma merienda en el infierno. En su caso, viajará también hacia Andalucía para medirse al UD Almería en en Los Juegos del Mediterráneo. Las cuentas de Nuno Espirito Santo pasan por sacar los tres puntos contra los almerienses y esperar que el Granada les haga un favor y ganen al Atlético en la última jornada. Esta combinada dejaría a los ches en la tercera plaza y a los de Simeone en la cuarta posición.

"Es el partido de nuestra vida", resume Nuno sobre la importancia del enfrentamiento contra el Almería.

"Todo se va a decidir en la última jornada y todo es posible, incluso la tercera plaza. Vamos a ir a ganar y a conquistar el poder jugar en Champions League la siguiente temporada. Estos jugadores enseguida se levantan, tenemos una actitud muy buena de cara al optimismo que tenemos que tener. Es el partido de nuestra vida y no hay que dudar. Queremos crecer sin límites, el camino no se termina hoy ni en el próximo partido, sigue mientras estemos con ese espíritu. Nuestra afición nos apoya desde el primer minuto al último, en Almería será importante su apoyo”, analizó el técnico portugués al término del empate contra el Valencia.

Como oposición se encontrarán un Almería más necesitado que nunca. A los de Sergi Barjuán no les quedan muchas opciones de mantener la categoría y el milagro pasa por ganar en casa al Valencia y esperar los pinchazos de Deportivo de la Coruña y de Granada. Suman 32 puntos y están a dos de los dos equipos anteriormente citados. Como diría Luis Aragonés: a los almerienses no les queda otra que "ganar, ganar y volver a ganar".