El cambio de categoría obliga al filial colchonero a modificar la base de su plantilla. Si bien es cierto que los malos resultados obligan de por sí a hacer radicales modificaciones, el descenso de Segunda División B a Tercera División hace que este trabajo de búsqueda y adaptación sea aún más laborioso.

Varios son los jugadores que han abandonado la disciplina rojiblanca. Ian González, Borja Galán y David Gil son los primeros que dicen adiós. Los tres, de la mano, ponen rumbo a Getafe, en donde se pondrán a las órdenes de Luis Navarro en el filial azulón. Ian ya sabe lo que es jugar en el sur de la capital, ya que en la 2013/2014 jugó e las órdenes de Jimeno en el cuadro getafense.

La marcha del cancerbero quizás sea una de las más dramáticas. Futuro y disciplina, David Gil ya sabe lo que es ir convocado con el Cholo, ocupando plaza incluso en las listas encuentros vitales como frente al Bayer Leverkusen de la pasada edición de la Champions League.

Peero dos de estas marchas ya han sido subsanadas. La secretaría técnica se ha puesto manos a la obra con celeridad y ya han incorporado dos jugadores que llegan para aupar a los colchoneros en esa lucha por volver a la categoría de bronce del fútbol español. La Segunda División B pasará, entre otros nombres, por las botas del mediocentro Diego Díaz, procedente del Extremadura y de Juanma Labrador, que llega de la Balompédica Linense. Balona que, ha estado peleando por meterse en playoff hasta las últimas fechas.

Mediocentro y delantero respectivamente, los nuevos jugadores llegan para eso, luchar, dejarse la piel por un ascenso que es el objetivo de la escuadra atlética.