La Comisión Antioviolencia ha emitido en la mañana del miércoles un comunicado en el que propone multas de 60.001 euros para cada uno de los cinco aficionados portugueses que lanzaron bengalas durante el partido de Champions League disputado la pasada semana en el Vicente Calderón entre el Atlético de Madrid y el Benfica. Además, propone una multa de 8.000 euros para el propio club madrileño por las deficiencias en las medidas de seguridad.
La afición portuguesa pagará por las bengalas
Las multas más cuantiosas por la Comisión Antiviolencia han ido a parar a la afición del Benfica. Durante el trascurso del partido, y especialmente cuando el equipo portugués hizo el gol del empate, los aficionados, que estaban ubicados en el primer y segundo anfiteatro del fondo norte del Vicente Calderón, encendieron bengalas y las lanzaron tanto al campo como a los aficionados del Atlético que se encontraban en la grada inferior, llegando a tener que ser atendidos algunos de estos tras recibir los impactos.
La Comisión ha propuesto multar con 60.001 euros a cada uno de los cinco aficionados que lanzaron esas bengalas e, igualmente, también propone una multa de 6.000 euros para cada uno de los tres aficionados que encendieron bengalas, aunque no las llegaron a lanzar.
Por su parte, el Club Atlético de Madrid ha recibido una propuesta de sanción de 8.000 euros como consecuencia de la deficiencia de las medidas de seguridad en el control de acceso y permanencia de espectadores al no impedir que se introdujeran y, posteriormente, se encendieran nueve bengalas en el interior del propio estadio.
Antecedentes
La última vez que sucedieron incidentes similares en el estadio Vicente Calderón el propio club rojiblanco acabó mucho peor parado. La propia UEFA acabó multándole económicamente y además el Atlético de Madrid tuvo que jugar un partido de Champions League a puerta cerrada y sin público. Los incidentes fueron parecidos a los sucedidos en el partido ante el Benfica: el Olympique de Marsella visitó el Vicente Calderón y los ultras franceses, ubicados en la misma situación que en esta ocasión la afición portuguesas, encendieron varias bengalas que propiciaron en cierre del estadio.