3 de noviembre. Ese el último día en el que un equipo logró llevarse algo positivo de su encuentro ante el Atlético de Madrid. Lo hizo el Astana cuando españoles y kazajos no pudieron pasar del empate sin goles en el encuentro correspondiente a la cuarta jornada de la fase de grupos de la actual edición de Champions League. Fue el último día en el que el conjunto de Diego Pablo Simeone se marchó al vestuario, tras el pitido final, sin el premio de la victoria.

El Atlético de Madrid ha ganado todo desde el empate a cero con el Astana en Champions

Desde aquel día, siempre el premio del triunfo. Cada uno de los ocho encuentros que los rojiblancos han disputado ha acabado con la victoria de estos. Liga, Copa del Rey o Champions League. No importa la competición ni el rival que se ubique en la parcela contraria de césped, todos ellos han sucumbido ante el actual estado de forma de los del “Cholo” Simeone.

Mes y medio de competición en el que al Atlético de Madrid le ha dado tiempo de cosechar ocho triunfos. Sporting, Betis, Galatasaray, Espanyol, Reus, Granada, Benfica y Athletic Club. Son los ocho equipos que se han marchado de vacío en sus encuentros ante los colchoneros desde aquel 3 de noviembre. Ninguno ha logrado cortar una racha que se acerca, partido a partido, al récord histórico de victorias consecutivas del Atlético de Madrid, que está situado en 13 triunfos.

Llegaron los del “Cholo” al primero de esos ocho encuentros que aquí se mencionan, con ciertas dudas, frente al Sporting. No en el peor momento de la temporada, que fue cuando el Atlético enlazó dos derrotas ante Villarreal y Benfica, pero sí con cierto nerviosismo por los dos empates consecutivos ante Deportivo de La Coruña y el ya citado ante el Astana. Y precisamente con tal resultado parecía que iba a finalizar ese encuentro frente a los asturianos, cuando apareció Antoine Griezmann para salvar al Atlético y colocar el 1-0 definitivo.

Griezmann anotó el único tanto del partido frente al Sporting

De eso hace ya más de un mes y, sin embargo, parece que las cosas no han cambiado en exceso. Bien es cierto que el estado de ánimo de los rojiblancos es otro. Afrontan los partidos con la confianza de saberse en una dinámica totalmente opuesta, en la que la victoria suele acabar siendo el premio final, creando un escenario absolutamente diferente al de aquellos primeros días de noviembre.

A pesar de ello, hay cosas que parecen inamovibles en el club rojiblanco. Como el papel que cumple Antoine Griezmann en el equipo. Si aquel día el jugador galo tuvo que aparecer para decantar el encuentro tras cabecear a la red un balón peinado por Godín, en la última de estas ocho citas también tuvo que aparecer el 7 rojiblanco. Lo hizo con un gran zurdazo desde la frontal del área que superó a Gorka Iraizoz, desatando la locura en el Vicente Calderón el pasado domingo, y estableciendo su octavo gol en Liga y la octava victoria consecutiva para el Atlético de Madrid.

Parece haber encontrado el Atlético el camino a seguir. Con un inicio un tanto irregular, aunque siempre en la parte alta de la clasificación liguera, los de Simeone han vuelto a encontrar la solidez defensiva que caracterizó al que fuera campeón de Liga en la campaña 2012-13. Con la incuestionable filosofía del “partido a partido” de Simeone, poquito a poco, paso a paso, el Atlético va dando pasos de gigante.

Y es que estos ocho triunfos consecutivos, además de suponer la mejor racha de victorias desde hace más de dos años (octubre de 2013), se han materializado en la clasificación para los octavos de final de la Champions League, en los que se enfrentará al PSV holandés, y en que el Atlético de Madrid haya recortado los cuatro puntos de distancia que separaban a rojiblancos y Barcelona, que encabezaba la tabla clasificatoria. A día de hoy, gracias a las cinco victorias consecutivas en la competición doméstica, y los dos empates que encadenan los blaugranas, rojiblancos y culés comparten ese honor. Este jueves el Atlético de Madrid buscará ampliar a nueve su contador de victorias y, además, certificar su clasificación para la siguiente ronda de la Copa del Rey.