No es tiempo de fiestas y celebraciones en el seno del Real Betis, que consume las últimas bocanas de oxígeno en la máxima categoría a la espera de peregrinar el próximo curso por el ostracismo de la Segunda división. Es por lo que el club que preside Manuel Domínguez Platas ha preferido cancelar el típico acto oficial en el Real de la Feria de Abril de Sevilla.

A diferencia del año pasado, donde toda la plantilla se concentró en una famosa caseta para llevar a cabo un almuerzo y se vitoreaban a figuras extintas como Pepe Mel, Miguel Guillén o Vlada Stosic, se aprovechaba para celebrar la clasificación europea además de perfilarse la renovación del extécnico madrileño del cuadro verdiblanco.

Pues bien, tan solo un año después las circunstancias obligan al club a reflexionar en un periodo donde miles de sevillanos y turistas disfrutan de una semana llena de color, bailes y armonía.