Un milagro prácticamente imposible no tuvo lugar en El Sadar. Los resultados de Getafe y Granada no acompañaron a la intensidad de los rojillos por su salvación. El conjunto verdiblanco tampoco le puso las cosas fáciles a los de Gracia, que no tuvieron suficiente con los goles de Oriol Riera y Acuña.

Para más inri, un desafortunado suceso empañó la final entre los equipos descendidos. El desprendimiento de la grada sur de El Sadar poco más de diez minutos tras el comienzo del encuentro, provocó la evacuación de cuatro heridos leves a centros hospitalarios y el retraso de todos los encuentros que se estaban disputando al mismo tiempo.

Comienzo accidentado

A pesar del resultado favorable con el que se zanja la primera mitad para el conjunto rojillo, no se disputó en las condiciones óptimas. El desprendimiento de una grada baja en la zona sur, tras la portería de Adán, retrasa el encuentro más de media hora.

Menos de un minuto necesitó Cejudo para tener en sus botas la primera ocasión clara para los de Gracia. Sin embargo, el guardameta Andrés Fernández tuvo que atajar una escapada de Cedrick. El partido comenzó eléctrico, con muchas ganas y necesidad por parte del Osasuna, sin embargo el Betis supo controlar de primeras la situación en El Sadar.

Se hacen notar los nervios en Pamplona tras otra ocasión clarísima de Oriol Riera en el minuto diez que precede al primer gol de los rojillos que vendrá de mano del delantero catalán, que alcanza los 13 goles en Liga esta temporada.

Fue en la celebración de este gol cuando tuvo lugar el desprendimiento de la zona baja del graderío sur de El Sadar. Durante los minutos en los que el juego está parado, los jugadores se vieron obligados a ayudar a aficionados que habían caído al terreno de juego. Mientras que la grada rojilla emite cánticos a favor de los jugadores verdiblancos, que se han encargado de acercar a algunos heridos al personal sanitario, los árbitros deliberaban acerca de la continuación del partido. Tras reunirse el capitán navarro, Puñal, y el delegado de campo con algunos aficionados, se vuelve a reanudar el encuentro tras 36 minutos de parón y cuatro heridos leves trasladados a hospitales.

A la reanudación del partido, tanto Granada como Getafe van ganando en sus respectivos enfrentamientos, lo que complica aún más la salvación del Osasuna, a pesar de su victoria.

Pero llegaría el segundo gol rojillo a los pies de Acuña en el minuto 22, tras una jugada de Roberto Torres, que rechaza Jordi Figueras, quedando un balón muerto a los pies del delantero navarro que solo tuvo que acompañar el balón.

Continuó dominando plácidamente el Osasuna en El Sadar cuando la LFP confirmó que todos los encuentros que se estaban disputando en ese momento verían retrasado el inicio de su segunda mitad para no adulterar la competición.

Sin embargo, los de Gracia se relajan tras el segundo gol, y Andrés Fernández se ve obligado a realizar una palomita a un disparo cruzado de Juanfran a pierna cambiada. Durante los últimos minutos de la primera mitad, el cuero apenas se alejaba del área de Andrés Fernández.

Un derechazo desde fuera del área de Salva Sevilla que se va fuera acaba la primera mitad más larga recordada en los últimos años, regalando ventaja a los navarros en el marcador, pero con un Betis activo y una clasificación que no sacaba a los rojillos de los puestos de descenso.

Un mero trámite

Tras un pequeño descanso en El Sadar, se reanudaron todos los encuentros al mismo tiempo, y los pupilos de Calderón emitieron el mensaje claro al Osasuna de que no iba a regalarle nada, con unos primeros minutos de peligro para los palos de Andrés Fernández.

Apenas dos minutos necesitó N’Diaye para rematar cerca de la portería del cancerbero rojillo, con poca potencia directo a las manos del guardameta murciano. Un par de intentos del delantero canario Rubén Castro asusta a la defensa de Gracia, que continúa en descenso.

Se encontró entonces activa la defensa del Betis, encarando los intentos de acercamiento por parte de la delantera rojilla. Debuta con la primera plantilla verdiblanca el quinto canterano con Calderón, después de Pedro y Ceballos, Agustín Emmanuel “Pibe”, dejando detalles de calidad, como un centro a N’Diaye, que brindó una clara ocasión.

Tras 25 minutos de juego, llegó el gol verdiblanco gracias al tanto conseguido por Chica, aprovechando su juego a banda cambiada, encaró a su defensor, quebrándolo hacia dentro y lanzando un tremendo chut a la escuadra más lejana del portero, logrando batir a un gran Andrés Fernández, que había llevado a cabo una gran actuación hasta el momento.

Pero este tanto verdiblanco no relaja a los de Calderón, que continúan luchando y creando ocasiones, como alguna de Rubén Castro, que el guardameta navarro ha salvado del empate en El Sadar.

Aprieta el Betis mientras el Osasuna parecía estar más pendiente del partido en Vallecas, del que dependía su salvación, que de su encuentro en Pamplona.

Un par de posibles penaltis no pitados se sucederán para ambos equipos en los últimos minutos, mientras los dos porteros realizan actuaciones de protagonismo hasta que finaliza el encuentro al mismo tiempo que los demás, permaneciendo el Osasuna en puestos de descenso.

La victoria del Getafe en Vallecas y del Granada en Pucela anulan el resultado victorioso del Osasuna en El Sadar, en un encuentro donde el conjunto verdiblanco no ha sido capaz de despedir la categoría de oro con una victoria. El accidente con el graderío sur de El Sadar y el descenso de los de Gracia y los heliopolitanos, finaliza la temporada desastrosa de ambos equipos, que se volverán a ver las caras en la Liga Adelante.