Empate técnico en la Ciudad Deportiva

Hispalenses y nazaríes protagonizaron un choque trepidante de similares objetivos en la Ciudad Deportiva Luis del Sol. Los locales llegaron a esta cita con la obligación de sumar ante uno de los rivales más fuertes de la categoría, para ofrecer una alegría a su afición y volver a colarse en la pomada de cabeza. Por el contrario, los rojiblancos viajaron a la capital andaluza en busca de un resultado viable que mantuviera sus posibilidades y aspiraciones por los play-offs de ascenso, siendo el conjunto que limita los puestos de honor.

El Betis golpeó primero

Los verdiblancos, sapientes de la idílica oportunidad que se presentaba en el día de hoy, saltaron al tapete de la Avenida de Italia con la única misión de saldarse con los tres puntos que darían un plus a los de Merino, de cara a los play-offs por el ascenso. A destacar las ausencias de Montoya y Carlos García, convocados por el primer equipo para viajar a Albacete y el debut del juvenil Junior.

Desde el pitido inicial, el conjunto de las trece barras tomó las riendas e intentó poner en apuros al marco defendido por Dimitrievski. La ausencia de Carlos García otorgó la batuta del centro del campo a De La Hoz, acompañado de Álvaro González un poco privado de tareas defensivas.

El transcurso de los minutos, decantó el encuentro del lado de los locales que intentaron acercarse una y otra vez a la meta rojiblanca, pero la ineficacia a la hora de enlazar balones óptimos con la punta de ataque imposibilitó las opciones de un conjunto que necesitaba los tres puntos para volver a entrar en la quema. Los locales, ante el empuje de su afición, intentaron un arreón final que les diera la posibilidad de anotar un gol y poner tierra de por medio antes del final de los primeros cuarentaicinco minutos.

Por ello, los verdiblancos subieron la línea de presión que terminó por ahogar a un conjunto visitante impasible ante las envestidas locales. Rozando el éxtasis de la primera mitad, Morante se introdujo en su propio marco el esférico tras un disparo a la madera de Álex Alegría.

Tras el gol inicial, el club visitante intentó  reponerse, pero los primeros cuarenta y cinco minutos acabaron con el citado dominio local.

Ilusiones lastradas

Béticos y granainos comenzaron los segundos cuarenta y cinco minutos con un planteamiento renovado, buscando sin cesar un gol que les otorgara el ansiado objetivo.

Los visitantes emplearon un estilo eléctrico y veloz, acechando con insistencia el arco defendido en el día de hoy por Pedro. La solidez defensiva forjada por Pozo y Caro repelió en primera instancia cualquier posibilidad rival, pero rondando el minuto 51, el visitante Isaac controló un centro en el área hispalense, para batir a placer a Pedro, subiendo las tablas al marcador.

El empate trastocó los planes de Merino, que introdujo a jugadores rápidos y habilidosos que intentaran dinamitar el encuentro, pero esta vez el plan no surtió efecto. El reloj corría y la superioridad bética decantó el dominio del esférico a su lado, que retomando las riendas de un encuentro algo parado tras el empate nazarí. Los verdiblancos, inconformistas con el resultado, buscaron sin cesar un segundo gol que ofreciera la ansiada victoria.

Una vez más, el Real Betis se mostró algo errático en la salida de balón, lo que benefició las envestidas del conjunto local, que puso en serios aprietos a Pedro en numerosas ocasiones. Los verdiblancos intentaron retomar el timón del choque, sin suerte desde el primer momento, esperando el Granada las indecisiones rivales para salir al contraataque.

Finalmente el ir y venir de ocasiones no pudo ser materializado por ningún conjunto por lo que tanto hispalenses como nazaríes llegaron al final del encuentro con un pacto de no agresión.

Los verdiblancos, con este resultado, caen relegados a la séptima posición liguera con 37 puntos, a expensas de lo que hagan equipos como el Real Jaén o el Villanovense. Por el contrario, los rojiblancos continuarán una semana más limitando los puestos de play-offs por el ascenso, si el Almería "B" no lo impide.

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