El filial verdiblanco rascó un punto in extremis en su visita al San Roque de Lepe en un choque donde le tocó ir a remolque durante los noventa minutos. Un doblete del ex canterano verdiblanco Luis Lara volvió a dejar en evidencia a la zaga hispalense, la más goleada de la división de bronce. Tras estar encajonados atrás durante toda la primera mitad, en un monopolio de ocasiones onubenses, los de Merino supieron reponerse y revertir la imagen en unos segundos cuarentaicinco minutos que cambiaron el devenir del encuentro y registraron un resultado más que merecido.

Juanma en primera instancia anotó una pena máxima provocada por el central Nacho, que a posteriori sería el protagonista del encuentro. Cuando el mismo expiraba, un libre directo pegado a la línea lateral le brindó la última oportunidad al conjunto bético para buscar el empate, ocasión que incluso permitió subir al área rival al guardameta Ángel de la Calzada. Cuando centró Abeledo, Nacho se alzó sobre el resto de protagonistas y cabeceó a la red para desatar la locura de los suyos y rascar un punto que se antojaba imposible.

A pesar de ello, el empate vuelve a dejar en evidencia el hacer de Merino, un entrenador que sigue sin dar con la tecla para que los buenos resultados lleguen aunque parece estar tranquilo con su empresa. Previsiblemente, otro entrenador llevaría ya mucho tiempo lejos de Heliópolis pero los presuntos amiguismos con la directiva verdiblanca parecen mantenerle en el puesto, a pesar del malestar y las quejas de numerosos aficionados béticos, que ven impasibles como semana tras semana su filial se arrastra por los campos de la división de bronce.

Un solo equipo sobre el terreno de juego

San Roque y Real Betis salieron al tapete del Ciudad de Lepe con la misión de buscar una victoria que les otorgara tres puntos idílicos para proseguir en la lucha por sendos objetivos. Sin aparentes sorpresas en el conjunto local, Merino presentó una alineación renovada con numerosas novedades. De la Calzada fue el guardameta elegido por el técnico gaditano en detrimento del extremeño Pedro e impuso sorprendentemente a Nacho en la medular, por delante de los centrales Pozo y José Carlos.

A pesar de los cambios, la partida no le salió del todo bien y un canterano bético le amargó la tarde. Cuatro minutos le bastaron a Luis Lara, cedido en la actual campaña por los verdiblancos, para romper los esquemas de Juan Merino y adelantar a un conjunto que monopolizó las ocasiones con peligro. El filial intentó reponerse pero su inoperante intentó derivó en un nuevo disparo raso cruzado de Luis Lara, que volvió a reivindicarse y anotó el segundo gol de la tarde, demostrando el por qúe debería haberse quedado en el filial hispalense.

El técnico bético intentó trastornar los esquemas intercambiando la posición de Francias y Abeledo pero poco le sirvió. Una ocasión de Rafa Navarro cuando la primera mitad expiraba fue lo único a destacar en un equipo que volvía a ofrecer una imagen moribunda otra semana más.

Agónico empate, aunque insuficiente

La entidad local se marchó al túnel de vestuarios con los deberes cumplidos, merced al doblete de Luis Lara que puso tierra de por medio para hacer presagiar una segunda mitad aparentemente tranquila. A pesar de ello, Juan Merino consiguó revertir la imagen de su equipo y una acción aislada cambió el devenir del encuentro.

Cinco minutos más tarde del pitido inicial, Nacho cayó en el interior del área y provocó una pena máxima que Juanma supo aprovechar, recortando distancias y instaurando el miedo en el cuerpo de los leperos.

El tanto avivó las opciones visitantes, que incluso estuvieron a punto de empatar el choque merced a un disparo fortísimo de César de la Hoz, que repelió a la perfección el guardameta local Bocanegra. Por igual, pudieron hacerlo los leperos en la réplica a la salida de un córner.

A partir del ecuador de la segunda mitad, el choque entró en un ir y venir de ocasiones carentes de peligro para los arqueros de sendos equipos, aunque los visitantes lo intentaron con más ahínco y merced a su intento, llegó el empate definitivo. Fran Díaz, Nieto y Juanjo, este sustituyendo al primero que se marchó lesionado, intentaron aportar un hálito de esperanza y aire fresco a las opciones ofensivas aunque sus acciones se contaron con los dedos de una mano.

Un libre directo cuando el encuentro ya expiraba permitió avivar las opciones verdiblancas por una última vez, algo que no desaprovechó Nacho, reivindicado en el encuentro de hoy. El central hispalense se alzó por encima del resto y cabeceó a la red con rabia para imponer el 2-2 definitivo y cosechar un punto agónico a la par que insuficiente.

La semana próxima, el filila recibirá al Recreativo de Huelva, un gigante herido que buscará sin cesar tres puntos necesarios para reengancharse a los puestos altos. Por el contrario, el San Roque de Lepe volverá a jugar ante los suyos, esta vez recibiendo al Linares Deportivo.