Llega la fecha marcada en el calendario de todos los hispalenses. La ciudad de Sevilla volverá a vibrar con sus dos equipos enfrentados una vez más, esta ocasión en el Benito Villamarín. Como todos saben, poco importan los resultados o la plantilla de ambos conjuntos en estas citas, donde está en juego el honor y la bendición de reinar la ciudad hasta el próximo envite.
El Real Betis Balompié tendrá enfrente probablemente a uno de los rivales más duros de la categoría, aunque no esté refrendando su potencial como visitante, registrando unos números paupérrimos y situándose entre los tres peores equipos fuera de su feudo.
A pesar de ello, bien es sabida la intensidad inicial que aportan en los derbis y la capacidad para morder al eterno rival desde el minuto uno. Por ello, los pupilos de Mel deberán luchar contra viento y marea si desean brindarle una alegría a su afición y cosechar una victoria que tanto tiempo lleva resistiéndose.
Luces y sombras
Respecto al estilo de juego, Emery ejercerá un 4-3-3, similar al que tan bien está resultando el presente curso, volcando el juego de su equipo en las parcelas ofensivas, donde los de Nervión muestran una efectividad inconmensurable, demostrada a ráfagas tras su irregular puesta en escena. La rocosidad que ha caracterizado al conjunto de Unai en los últimos años está puesta en duda en las últimas fechas, una situación que deberán revertir si quieren asegurar la zona defensiva.
El entrenador guipuzcoano quiere imponer un juego muy vistoso a los suyos, ejerciendo una asfixiante presión ofensiva y en el que el esférico será el protagonista en su juego. A pesar de jugar contra el Betis, el técnico ha declarado que no se arrugará y le disputarán el dominio de la mimosa al conjunto hispalense. Gran parte de ello la tendrá Krychowiac. El pulmón del conjunto rojiblanco, aportará la garra y el desgaste que tan importante será ante jugadores como Petros o N'Diaye. El argentino Banega, ofrecerá la calidad y la visión de juego, vital para las aspiraciones del equipo y determinante en jornadas anteriores. No obstante, a pesar del protagonismo de las jugadas elaboradas, el conjunto nervionense también crea importante peligro en las jugadas a balón parado, con hombres corpulentos y altos como Rami, Llorente o Krychowiac.
Quizá la gran quimera del club rojiblanco supone la actitud defensiva. De los dieciséis encuentros domésticos, han encajado gol en doce de ellos. De los once primeros clasificados, el Sevilla F.C es el segundo equipo que más goles recibe, dejando la cifra en 19 tantos. Esta semana, deberán cambiar la cara y mejorar el nivel defensivo ante una de las delanteras más eficaces de la élite nacional.
En portería, el mejor posicionado es Sergio Rico, que merced a sus portentosas actuaciones se ha ganado la confianza del míster y se postula como uno de los grandes arqueros de la categoría. Mariano, Carriço, Rami y Tremoulinas conformarán el centro de una zaga agresiva y muy eficaz hasta el momento. En la medular, Krychowiak, Banega e Iborra tendrán la difícil misión de arrebatarle la posesión que tanto le gusta al Betis. Por delante, Konoplyanka y Vitolo serán los encargados de aportar el desborde y la velocidad, que supondrán la mayoría de peligro en la zaga rival. A pesar de situarse en posiciones escoradas, destaca la proyección goleadora de ambos Finalmente, en punta estará Kevin Gameiro, el hombre de los goles importantes.
Como ya ha demostrado en el arranque liguero, el Sevilla está capacitado para lo peor y lo mejor, y por supuesto derrotar a cualquier rival. A pesar de ser un rival previsiblemente superior, deberán demostrar sus bazas y virtudes, para vencer al eterno rival y seguir en su lucha por los puestos europeos.