Como apuntó Christopher Reeve, "Nuestros sueños al principio parecen imposibles, luego se convierten en improbables y más adelante, cuando convocamos la voluntad, se hacen inevitables”. Y bien, los verdiblancos deberán aunar sus fuerzas y desarrollar un partido idílico para convertir lo improvable en real y es que en el deporte rey, nada es imposible. 

Real Madrid y Real Betis disputan este sábado la segunda jornada liguera de vuelta, en el regreso de Zinedine Zidane como entrenador a un campo donde nunca ha ganado. Madrileños e hispalenses lo hacen con la necesidad de conseguir una victoria vital para comenzar por la lucha de sus objetivos. Los verdiblancos llegan tras revertir medianamente la imagen mostrada a comienzos de año, tras cosechar un valioso empate en El Madrigal. Por el contrario, el conjunto blanco llega renovado e inspirado con la imposición del técnico francés, venciendo y convenciendo tras la goleada al Sporting de Abelardo.  

Más y más

Zidane deberá arengar a los suyos, confirmar su valía y comenzar a despejar todas las dudas acaecidas en torno al club tras los malos resultados de Benítez. El cambio de filosofía respecto al estilo del ex-técnico parece haber cuajado en los jugadores que esperan continuar adaptándose con el transcurso de las semanas al modelo que quiere imponer el nuevo entrenador y que tantas alegrías quiere brindarle a la afición blanca.

La patente inferioridad del conjunto verdiblanco no supondrá aparentemente demasiados problemas para el Real Madrid. La calidad de hombres como Cristiano, Modric o Benzemá bastaría en principio para vencer a un Real Betis demasiado vulnerable en facetas defensivas, que ya recibió una dolorosa goleada en la segunda jornada liguera.

A pesar de ello, la historia demuestra que el conjunto verdiblanco podría suponer una rosa envenenada para los intereses de Zidane. Un equipo que buscará desmedidamente la victoria, sapientes de las carencias pero atrevidos y con una clara premisa: nada que perder. Demostrado quedó el sufrimiento de Mourinho años atrás al acoso ty derribo del conjunto bético acompañado de la infalible afición, que buscará la presión en campo contraria y no dejarle espacios a los magos del balón.

Con la baja por lesión de Bale, James, que aún no ha sido de la partida en los primeros dos partidos con el nuevo entrenador, podría ocupar la posición en la media punta de Isco, desplazando al malagueño a la banda derecha o bien, ser el colombiano el que supla directamente al ‘11’ por el costado, plaza a la que también podrían optar Jesé o Lucas Vázquez.

Apelar a la historia dos décadas después 

 La entidad de las trece barras buscará lograr la machada y conseguir una victoria similar a la de 2012, cuando Beñat maravilló a todos decidiendo el encuentro tras un duro zarpazo cruzado. Por ello, el técnico interino planteará un estilo atrevido aunque salvaguardando la faceta defensiva, renovada casi al completo por las numerosas bajas. Además, la buena imagen registrada en el debut liguero de Merino hace que las sensaciones sean positivas de cara a esta dura piedra de toque. 

En un partido muy disputado, los pupilos del técnico gaditano plantearon un encuentro muy serio y planteado con mucha profesionalidad, sin conceder apenas ocasiones y noqueando todas las posibilidades del rival. De menos a más, los verdiblancos supieron reponerse tras el arreón inicial.  El trabajo realizado dio sus frutos y los cambios revolucionaron el partido. Los hispalenses, realizaron un gran encuentro, bien plantado atrás y dominando el esférico, donde se cumplió el regreso de hombres como Kadir o Fabián. 

El técnico verdiblanco, ha disipado y apartado las dudas que ponen en duda su futuro, declarando sentirse tranquilo y seguro, a la espera de la llegada de algunos hombres que apuntalen el equipo y otorgue mejores resultados. Por ello, Merino lo tiene claro: “No pienso que pueda estar más o menos tiempo, al final todos dependemos de nuestro trabajo y de los resultados. Esas decisiones las tienen que tomar otras personas, nosotros lo que hacemos es tomar decisiones técnicas”.

Merino apostará por el 4-2-3-1, perfilándose  Rubén Castro como máxima referencia ofensiva acompañado en la mediapunta de Fabián. En la defensa habrá de nuevo cambios debido a las lesiones: Molinero, Pezzella, Bruno y Vargas serán los elegidos.  N’Diaye y Petros se postulan como titulares debido al gran desarrollo que emplearon ante el Villarreal. En las bandas, Kadir parece ser el mejor posicionado  para la derecha recayendo en la banda izquierda Joaquín.

Convocatorias

Real Betis Balompié: Adán, Dani Giménez, Molinero, Bruno, Pezzella, Varela, Vargas, Petros, N'Diaye, Digard, Dani Ceballos, Fabián, Portillo, Cejudo, Kadir, Joaquín, Jorge Molina y Rubén Castro.

Dani Ceballos regresa a una convocatoria tras quedarse fuera el pasado partido por bajo rendimiento a criterio del entrenador heliopolitano. En el otro extremo de la balanza destacan los nombres de Van der Vaart y Ricky van Wolfswinkel. La pareja de holandeses no entran en los planes de Merino y verán el encuentro desde la grada.

Heiko Westermann tampoco llega a tiempo para acceder a lista y prosigue al margen recuperándose de su lesión en el dedo pulgar de su pie derecho. Fabián y Kadir, tocados durante la semana, sí forman parte de la expedición.

Real Madrid: Keylor Navas, Casilla y Rubén Yáñez, Varane, Pepe, Nacho, Marcelo, Carvajal y Danilo, Kroos, James, Casemiro, Kovacic, Modric e Isco, Cristiano Ronaldo, Benzema, Lucas Vázquez y Jesé.

El técnico franco-argelino deberá realizar el descarte de un portero antes del encuentro.

Posibles alineaciones