Una de cal y otra de arena, esa fue la imagen que mostró ayer el Real Betis Balompié, un equipo que se le ve con ganas y con mejoría en su juego pero que sigue repitiendo los mismos errores  que durante toda la temporada. Esos fallos le volvieron a condenar ayer, con un partido plácido y controlado el equipo de Heliópolis desaprovechó dos goles de ventaja ante un Rayo Vallecano que supo contrarrestar los dos tantos verdiblancos en apenas cinco minutos. De nuevo las dudas volvían al feudo verdiblanco y a pesar de que echaron el resto en la segunda parte los pupilos verdiblancos no consiguieron sacar los tres puntos.

El Real Betis planteo un partido con un equipo ofensivo, las bajas de N´Diaye o Montoya hicieron que Merino sacará un once diferente al de las últimas jornadas con Ceballos en el medio con Petros y Jorge Molina acompañando a Rubén Castro como principales novedades.El primer equipo en meter miedo y llegar con peligro fue el equipo visitante,  el conjunto dirigido por Paco Jemez  estrelló un balón al travesaño por medio de Embarba. Esa ocasión fue un punto de inflexión en el partido, el equipo bético se despertó y fue a por el partido con mucho más descaro donde la velocidad de Musonda y las buenas subidas de Molinero fueron clave para alcanzar el primer tanto. El lateral derecho verdiblanco fue el que le puso un balón medido a Rubén Castro para que con un gran cabezazo adelantara al Betis en el marcador, con este tanto el conjunto de Heliópolis se quitó un peso de encima y fue a por el segundo nada más sacar de centro el Rayo Vallecano. El segundo gol vino tras un córner en jugada ensayada,  de nuevo el tanto tuvo un nombre propio y no pudo ser que el de Rubén Castro, a sus 34 años el delantero canario lleva 12 goles en esta liga.

El segundo tiempo fue totalmente diferente, el Real Betis salió totalmente relajado con los dos goles de ventaja y lo acabó pagando. Cinco minutos le bastaron a Manucho y al Rayo Vallecano para destrozar la débil defensa verdiblanca, primero un cabezazo inapelable del angoleño acortó distancias y pocos minutos después un remate acrobático puso la igualada en el marcador dejando la noche aún más helada para los aficionados béticos. Dos goles en los primeros minutos del segundo tiempo fueron un mazazo para los heliopolitanos, Merino busco la reacción pronto con algún cambio e hizo debutar a Damiao, el delantero brasileño mostró sus ganas por agradar pero se notó que aún no está acoplado al equipo y está un poco fuera de forma. Los jugadores béticos  buscaron de todas las maneras un gol que dejara los tres puntos en casa pero la pelota no quería entrar, multitud de llegadas heliopolitanas  morían en la orilla. La ocasión más destacada fue el larguero de Ceballos tras un buen pase de Rubén Castro, la afición se echaba las manos a la cabeza al ver como se escapaban dos puntos del Benito Villamarín cuando todo parecía abocado al triunfo. De nuevo ante un rival directo y de nuevo el Betis no conseguía un triunfo en casa.

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