Este jueves, hay una 'Final' sin título de por medio en Barcelona. Espanyol y Real Betis se juegan casi media salvación en este partido, pues una victoria significa respirar en la clasificación. Dos conjuntos infieles a su gente que no para de dar para recibir tan poco. Eso pasa por Cataluña, en un conjunto empeñado en pasarlo mal hasta final de temporada. Los dos últimos triunfos ligueros han permitido tomar oxígeno al cuadro blanquiazul, que no se debe fiar lo más mínimo. Los de Juan Merino, por su parte, llevan casi lo mismo sin perder que sin ganar. Los empates, a estas alturas, sirven de poco. Más aún si los consigues en tu propio feudo. Por ello, viaja a la Ciudad Condal con la intención de dar un ansiado golpe encima de la 'mesa'. 

La verdad es que no se le da demasiado bien el Espanyol al Real Betis. Es verdad que en casa, sobre todo, está sabiendo sacar sus partidos adelante últimamente. Con la excepción, claro está, de lo que pasó en la ida en Heliópolis. Un rotundo 1-3 se llevó el equipo catalán en una noche para olvidar en los verdiblancos. El defensa Enzo Roco marcó pronto el primero. En el segundo acto, nada más arrancar, Caicedo y Víctor Sánchez firmaban la goleada. Ya al final, Rennella recortaba diferencias para 'maquillar' el resultado. Una de las tres victorias 'periquitas' fuera de casa de esta campaña ha llegado en Sevilla. Quitando ese duelo, los últimos pronósticos han terminado en encuentros igualados. Una victoria por 2-0 para los andaluces en la campaña de los 25 puntos con doblete de Rubén Castro, un empate sin goles en dicha temporada más una derrota por 1-0 con gol tempranero de Sergio García en el año de Europa. Hay de todo en la viña del señor. 

El 'Rifle' siempre dispara

El Espanyol, en casa, se suele hacer fuerte cuando el Real Betis es el rival. La victoria más holgada en su feudo ante el equipo verdiblanco llegó en el 2000, con un contundente 3-0. Esa campaña para el recuerdo en el que descendieron al mismo tiempo el cuadro bético, el Atlético de Madrid y el Sevilla. Como para olvidarse. No ha sido el único triunfo en el Siglo XXI, pues se recuerdan cinco más en Barcelona. Un par de 2-0 en las temporadas 2005/2006, con gol incluido del malogrado Dani Jarque, y 2008/2009. Los demás fueron triunfos 'pericos' por la mínima: 1-0. En 1998, 2011, con un tanto del 'Rifle' Pandiani, y 2013. Not bad.

Una tarde para echarse la siesta

También, cabe acordarse de esos partidos en los que no hubo ganador. En la historia más reciente, cuatro veces han terminado en empate los Espanyol - Real Betis. Dos de ellos acabaron siendo encuentros vistosos, con un 2-2 de marcador final. Además, destaca el 1-1 de principios de 2002 en una campaña que acabó con la clasificación verdiblanca para la UEFA Cup. El partido más feo, quizá, fue el 0-0 de hace unos años. Esta temporada para olvidar en Heliópolis, en lo general, que tuvo su nota más positiva ante el cuadro 'perico'. Porque se empató en tierras catalanas y se ganó en Andalucía. El rival más idóneo aquella campaña que ahora se ha convertido en casi una pesadilla. Qué curioso es el fútbol.

Y el 'Príncipe' llegó al final

Los béticos, por su parte, también tienen tres motivos para sonreír cuando visitan Barcelona. Especialmente, aquel 1-2 con ese gol de Edu en el 90' que significó tres valiosos puntos en una temporada donde se consiguió la permanencia de forma relativamente tranquila. Hay otro marcador igual cosechado en 2004, donde estuvo cerca la famosa Copa Intertoto. El marcador más positivo fue un precioso 2-4 logrado en el Estadio Olímpico. Hablamos de finales de 2002. Ya ha llovido desde entonces.

Los dos se conocen a la perfección, pues son dos históricos del fútbol español. Tanto, que hasta este verano se han visto las caras. Fue en un partido de pretemporada disputado en tierras catalanas, donde ambos conjuntos firmaron tablas. Rubén Castro, quién si no, empezó marcando para el equipo entrenado por aquel entonces por Pepe Mel. Caicedo hacía el definitivo 1-1 ya en la segunda parte para el cuadro dirigido en aquel momento por Sergio González. Cómo hemos cambiado. Como el partido terminó en empate, hubo penaltis. La tanda sonrió al equipo local, en el que anotaron todos sus lanzadores: Caicedo, Hernán Pérez, Álvaro González, Joan Jordán y Sylla. En los béticos, marcaron todos menos Dani Ceballos que quiso lucirse con un chut a lo panenka que quedó en nada. Sí lograron acertar su disparo: Rubén Castro, Piccini, Rennella y Xavi Torres. De esos cuatro, solo el canario tiene serias opciones de jugar. El segundo está lesionado, el tercero se ha marchado al Real Valladolid y el cuarto no tiene la confianza de su entrenador. Y es que medio año da para mucho. Imaginen analizar más de 15.