Se volvía a alzar el telón una vez más. Pero este escenario era distinto al que nos acostumbramos a vivir durante seis temporadas. Hoy el Cádiz volvía a la Segunda División y lo hacía en el primer derbi andaluz de la temporada, contra todo una Unión Deportiva Almería.

El equipo amarillo formó, tal y como se había estado barajando durante esta semana, con un equipo titular basado en el grueso del once que hace unos meses logró el ascenso de categoría. Un esquema basado en el 4-3-3, con Abel Gómez acercándose más a la media luna, con Álvaro y Salvi imprimiendo velocidad por los costados y como referencia Alfredo Ortuño. Las numerosas bajas en defensa también resultó un quebradero de cabeza para Cervera a la hora de elegir un once para medirse al equipo almeriense y Migue fue el elegido para acompañar a Aridane en el centro de la zaga.

Por parte del equipo local, Fernando Soriano apostó por la calidad de Fidel, Pozo y Chuli en un sistema 4-4-2 en el que el mismo Fidel haría como hombre más liberado. El técnico maño optó por dejar de inicio en el banco a nuevas incorporaciones como Diamanka, recien aterrizado del Real Zaragoza.

Primeros compases del encuentro

Los primeros minutos se caracterizaron por el orden y respeto en dos conjuntos que se veían algo nerviosos por el arranque liguero. Un Cádiz muy ordenado atrás y a la espera de las contras con Álvaro y Salvi, hacía recordar pasados partidos del Play-Off de ascenso. A raíz del minuto 15 de juego el Almería comenzaría a acercarse con más peligro a la portería de Alberto Cifuentes mientras que el Cádiz cometía muchas imprecisiones a la hora de sacar el balón jugado. Dos lanzamientos de esquina consecutivos para el conjunto local, magistralmente lanzados por Fidel, fue lo más destacado de estas primeras acciones del partido.

El primer tiro a puerta del equipo de la capital gaditana llegaría en el minuto 25, un tímido disparo desde la frontal de Álvaro que detenía Casto sin ningún tipo de problema. Problemas que llegarían para Soriano, cuando en el minuto 26 Dubarbier no puede continuar en el césped y se ve obligado a hacer la primera sustitución del partido.

El Cádiz arranca

Tras media hora en la que el cuadro visitante no se encontraba agusto en el partido llegaría el despertar. Dos ocasiones casi consecutivas meterían el miedo en la portería almeriense. La primera de Salvi a centro de Álvaro y la segunda, la más clara, de Ortuño de cabeza tras un centro del propio Salvi. Con las mejores sensaciones del equipo cadista se llegaría al descanso.

Comenzaría la segunda parte sin cambios en ninguno de los dos equipos y con el Almería dispuesto a darle una alegría a sus aficionados. El conjunto local quería la pelota y la tenía, parecía más convencido en su forma de juego y fueron tres las ocasiones consecutivas que tuvo para batir a Cifuentes. Pero sería el Cádiz el que se adelantaría en el marcador. Cuando mejor lo hacía el equipo local, Salvi estrella, desde fuera del área, un balón en el palo y Ortuño lo recoge y hace el primero a puerta vacía para los cadistas.

El Almería busca reacción, y la encuentra

Los siguientes minutos de encuentro estarían marcados por las lesiones, primero la de Luis que tuvo que ser sustituido por Juanjo y más tarde la de Migue que tuvo que dejar paso a Quintana y con ello reestructurar la defensa amarilla. Carpio pasó al centro de la zaga y Quintana al lateral.

Con esto, tras el saque de un córner, el Almería empataría el encuentro con un tanto del nigeriano Azeez. El jugador local anotaría a placer tras un mal despeje de la defensa cadista y sin que Cifuentes pudiera hacer nada. Después de la respuesta del cuadro almeriense el encuentro volvería a coger tintes de poco atrevimiento.

En el minuto 77 de partido Abel se retiraría para dejar entrada al canterano Juampe. Y será en estos últimos minutos de encuentro cuando el Almería tenga las ocasiones más claras para decantar el partido a su favor. Primero un disparo desde fuera del área de Chuli hace esforzarse a Cifuentes que la manda a córner y luego una doble ocasión, primero del propio Chuli que saca el portero cadista y luego Quique se encontraría con un inconmensurable Garrido que, bajo palos, salvaría al equipo gaditano.

Terminaría el encuentro con un Cádiz buscando, tímidamente, el gol sin arriesgar en defensa. Una defensa que ha dado muy buenas sensaciones en este primer encuentro y que vaticina dificultades en los equipos rivales para hacer un gol al equipo de Álvaro Cervera.