Remontada del CD Tenerife B, que encajó un gol antes de la media hora y luego supo remontar el resultado. Los goles de la dupla formada por Nata y Jairo, ambos por partida doble, posibilitaron al final una amplia y clara ventaja. El filial sigue al acecho del líder, el Atlético Granadilla, mientras que el Raqui sigue inmerso en puestos de descenso.
 

Claro dominio del filial

Tercera victoria consecutiva de los tinerfeñosDominio, posesión y balón del equipo de Quico de Diego, durante todo el encuentro, aunque en la primera media hora esto no le dio para crear ocasiones de gol. Sin embargo, y en la primera destacable, un saque de esquina acabó en un balón en la frontal que enganchó Marcos, entrando el balón muy cerca del poste. Saltaba así la sorpresa en el marcador, favorable para los de Antonio González.
 
Pero no le duró mucho la alegría al equipo sureño. En el 35’, Nata controlaba un balón dentro del área y remataba cruzado y abajo para conseguir un empate. El resultado pudo variar si el propio goleador hubiera precisado un remate de cabeza a centro de su compañero Jairo; todo esto en los últimos minutos de la primera parte.
 
El inicio de la segunda parte marcó el devenir del resto de partido. Nada más comenzar, Adrián se marchó por la banda derecha y centró al área, donde Nata solo tuvo que empujar el cuero para conseguir el segundo. Nunca perdió el control del juego el equipo blanquiazul que en todo momento fue dueño del partido.
 

Jairo anotó los dos goles de la tranquilidad

A partir de ahí apareció Jairo, el zurdo jugador de Valle Guerra, con espacios, que al tomarse más alegrías la defensa rival y acompañado de su gran técnica y velocidad, hizo mucho daño en la defensa del San Isidro, que se veían sin capacidad para poder parar las acciones ofensivas de este jugador.
 
En el 65’ una contra de tres contra uno conducida por el propio Jairo acabó en un recorte al zaguero para definir ante Juanje. Ya en el 81 anotó el segundo gol en su cuenta, tras una nueva contra rematada por alto, para hacer el cuarto.
 
Con este resultado concluyó el partido, aunque Amorín pudo poner el quinto, en una ocasión en la que desde dentro del área, controló y se giró rematando junto al poste.
 
Con todo, el filial ya suma 35 puntos en su casillero, y continúa una semana más en el segundo puesto del grupo XII de Tercera División, a dos punto del liderato. El Raqui San Isidro, por su parte, se hunde en el penúltimo puesto de la clasificación, a tres puntos del límite con la permanencia que marca el Laguna.