Séptima derrota consecutiva para cerrar la temporada. El Tenerife, falto de intensidad, ganas y un objetivo por el que luchar, se vio superado desde el primer minuto por un Sporting que puso toda la carne en el asador por lograr un puesto en las eliminatorias de ascenso a Primera División.

El Sporting mandaba desde el primer minuto

Los rojiblancos salieron a morder desde el comienzo del choque; tanto, que al minuto de juego, y tras un fallo en el despeje de Carlos Ruiz, lograban adelantarse en el marcador con gol del serbio Lekic. Al igual que la semana pasada, los blanquiazules encajaron un gol tempranero que dinamitó sus opciones en el partido.

Y es que el conjunto de Abelardo, a pesar de renunciar a la posesión, se cerró bien y se dedicó a salir a la contra en busca de la sentencia de un choque que parecía definido desde el principio. Así, Carmona enganchó un balón en la frontal del área para poner el 2-0 antes del minuto 15, dando por dilapidadas todas las opciones blanquiazules, que acusaron la ausencia de Ayoze Pérez y estuvieron faltos de profundidad y ocasiones durante todo el choque.

Antes del descanso habría tiempo para el tercer gol del Sporting, esta vez por medio de Scepovic, que sentenciaba el resultado cuando no se había cumplido el minuto 35. Los chicharreros, hundidos, le perdieron la cara al partido y acabaron vagando por el campo.

La segunda parte, aburrida y monótona

El segundo tiempo no fueron más que 45 minutos para dejar pasar el tiempo. El Sporting se propuso no hacer sangre, a pesar de que pudo haber anotado algún gol más. Los tinerfeños, apagados y derrotados, no encontraron en ningún momento la forma de hacer daño al Sporting, si bien Borja, en su último partido con el Tenerife, pudo anotar el gol de la honra tras un claro remate desde dentro del área que envió muy desviado.

600 minutos sin un gol tinerfeño

Se acaba así la temporada para un Sporting al que le espera Las Palmas en los playoffs por ascender a Primera División. Por su parte, el Tenerife echa el cierre con malas sensaciones tras siete derrotas consecutivas, y sin haber sido capaz de anotar un gol en más de 600 minutos de juego. Para los insulares, ya toca mirar la temporada 2014/2015, tras lograr holgadamente la permanencia y cumplir el objetivo inicial de la campaña.