Este fin de semana pudimos ver a Nino de vuelta al Heliodoro, pero enfundado con la elástica de Osasuna. Posiblemente desde su marcha en 2011, el Tenerife ha echado en falta un goleador, una referencia arriba, un delantero de talante incontestable.
Doce goles entre uruguayos
Esta temporada se apostó fuerte por el fichaje de un delantero de gran nivel. Un uruguayo, Diego Ifrán, fue el elegido. Desde el principio contó para Álvaro Cervera en la titularidad; solo la sanción de cuatro partidos por la roja que vio en Llagostera y la lesión que sufrió durante ocho partidos le apartaron del once inicial. Los nueve goles que lleva y la implicación del jugador hacen que haya cumplido con lo que siempre se esperó de él.
Pero los diferentes esquemas de juego y la rotación de jugadores nunca hizo encontrar el engranaje perfecto para Diego. Para tener el equilibrio perfecto se necesitaba a un canterano que despuntara como el año pasado, o que Maxi demostrase su calidad. Las expectativas puestas en él se fueron esfumando cada vez que tenía unos minutos. Apariciones simbólicas y sensaciones poco prósperas. Por eso, en el mercado de invierno se especuló con su posible salida.
"Soy delantero"
La llegada del nuevo entrenador era un síntoma de que las cosas tenían que cambiar. El rol de muchos jugadores se vio afectado, y Raúl Agné encontró en Maxi la inspiración y la compenetración perfecta con Ifrán. Su reivindicación como delantero hace unos meses le ha llevado a una nueva ubicación en el campo: "La posición me ayuda. Me siento más cómodo en el centro. Estoy cerca del gol. Eso es lo que más me ha influido", dijo Maxi.
Lo cierto es que ambos se entienden bien, se complementan a la perfección y en las últimas jornadas sus goles han llevado al Tenerife a sumar puntos muy importantes. "Me gusta mucho jugar junto a Diego. Me ayuda bastante con sus movimientos. Me desmarca”, añadió Maxi. Contra Osasuna los goles de la dupla uruguaya dieron los tres puntos a los insulares. En Huelva fue Ifrán quien anotó el tanto del empate final. Maxi, las dos jornadas anteriores, anotó el gol del empate en el derbi y el de la victoria contra el Leganés.
Sin duda, el aficionado tinerfeño puede respirar tranquilo por muchos motivos: los resultados acompañan, la posición en Liga puede verse como positiva y el gol parece tener nombres propios.