El de este fin de semana, en el Heliodoro Rodríguez López y ante el Llagostera, no fue un partido más para Cristo Martín. Y es que el futbolista de La Laguna jugó su partido número cien con la camiseta del CD Tenerife. El canterano, que ha desempeñado toda su carrera futbolística en clubes canarios, tuvo que marcharse durante varias campañas debido a que no encontraba hueco en la primera plantilla del club, hasta que en la temporada 2012/2013, en Segunda División B y con la llegada de Álvaro Cervera al banquillo blanquiazul, el de La Cuesta tuvo su oportunidad.

Llegó nueve años atrás al filial blanquiazul

Cristo Martín es un futbolista habilidoso, técnico y con capacidad para jugar de manera destacada detrás de un referencia, pudiendo aportar también escorado en ambas bandas. Ya en su época de formación era un futbolista que sobresalía sobre el resto, y por ello, en la temporada 2005/2006, recaló en el filial del CD Tenerife, aunque no fue hasta la siguiente campaña cuando se afianzó en el equipo.

Asentamiento en el filial antes de debutar con la primera plantilla

Antes de dar el salto al primer equipo, estuvo en el filial hasta la temporada 2008/2009, contando en cada una de las temporadas con un gran número de partidos (33 en la 2007/2008 y 30 en la 2008/2009) siendo pieza clave en el equipo, aunque siempre sufriendo su mayor hándicap como es la falta de gol, y es que en todos esos partidos y temporadas solo anotó siete goles. Aún así, el jugador comenzó a llamar las puertas del primer equipo y fue José Luis Oltra el que finalmente confió en Cristo.

Fue en la temporada 2008/2009, en la que Cristo estaba despuntando con el filial anotando cinco goles (su mejor campaña goleadora) y en la que quedaría campeón con el Tenerife B del grupo XII de la Tercera División y de la Copa Heliodoro Rodríguez López, cuando Oltra le hizo debutar con el CD Tenerife en competición oficial y en Segunda División. Con el entrenador valenciano jugó tres partidos, dos como titular y uno como suplente.

Cristo se marchó para después volver

Sus actuaciones no fueron muy destacadas; además, Cristo quería tener un mayor protagonismo y no contemplaba la posibilidad de volver al filial, por lo que la solución fue buscarle una salida. El destino del canterano blanquiazul en la temporada 2009/2010 fue en la isla vecina, el Universidad de Las Palmas, equipo en el que estuvo esa temporada y la siguiente, completando entonces dos campañas. Durante la temporada 2009/2010 su papel fue destacado pero no de jugador clave, ya que disputó un total de 20 partidos, nueve de titular siendo sustituido en cuatro de ellos y once como suplente, anotando un gol. En la segunda temporada tuvo una relevancia mayor en el plantel, aumentando el número de partidos jugados a 28, veintidós de titular.

De nuevo campeón de Tercera División con el CD Marino

Tras este periplo en la Segunda División B, Cristo volvió a Tenerife pero no al Tenerife, sino que su destino fue el CD Marino, que por aquel entonces militaba en la Tercera División. Era la temporada 2011/2012 y en ella jugó un total de 37 partidos, consiguiendo anotar dos dianas y  además se proclamó, como años atrás con el filial del CD Tenerife, campeón del grupo XII de la Tercera División y de la Copa Heliodoro Rodríguez López.

Esa misma temporada, el CD Tenerife había sufrido un nuevo revés al no conseguir el ascenso a la Segunda División, y se produjo la llegada de Álvaro Cervera al banquillo tinerfeño para intentar el objetivo; ése fue el momento en el que Cristo Martín tuvo la oportunidad de volver al CD Tenerife. Durante la pretemporada se ganó la absoluta y total confianza del entrenador y se convirtió en pieza clave para sus esquemas, llegando a disputar en la 2012/2013 un total de 31 partidos, 27 como titular y marcando un gol, en la visita del Leganés al Rodríguez López.

Cristo marcó ante el Leganés su primer gol como blanquiazul, en la 12/13 | Foto: @jacfotografo.

La falta de gol, su mayor lunar

Además, el año del regreso de Cristo fue el año del ascenso al fútbol profesional por parte del club, por lo que se podría decir que regresó en el momento oportuno. La temporada 2013/2014 fue la de la vuelta del Tenerife a la Segunda División, por lo que era un gran reto para el jugador. Su calidad y trabajo siguieron haciendo de él un futbolista importantísimo para Cervera y que no desentonó en la división de plata del fútbol español, jugando 30 partidos de  42 posibles, titular en 22 de ellos y saliendo desde el banquillo en ocho, aunque su casillero de goles se quedó sin estrenar.

Un gol en la 14/15 más que importante

Esta temporada se presentaba para Cristo como un reto para seguir siendo uno de los jugadores referencia del equipo pese a los refuerzos de verano, y por su buen nivel o los desafortunados fichajes, el de La Cuesta ha seguido contando con un gran número de minutos y de partidos sobre todo en el Heliodoro, donde juega de titular con una mayor asiduidad. Esta temporada ya lleva acumulados 28 partidos jugados, de los cuales 20 lo ha hecho como titular siendo sustituido en 13 y en ocho comenzando como suplente. Además, anotando un solo gol pero muy importante y significativo; el de la victoria ante Las Palmas en el derbi canario disputado en el Heliodoro.

Pese a no tener casi nunca durante su estancia en el club la titularidad asegurada por su irregularidad y falta de gol, es evidente que Cristo Martín es uno de los jugadores más queridos por la afición y de los más usados por los entrenadores que ha tenido debido a sus grandes dotes técnicas y habilidosas, que le hacen un jugador muy válido para la Segunda División y, como no, para el CD Tenerife. Por ahora van 100, veremos hasta cuantos partidos puede llegar vistiendo la camiseta blanquiazul.

Sexto jugador centenario en la plantilla

Con la llegada del tinerfeño a la centena de partidos, son ya seis los futbolistas de la actual plantilla del CD Tenerife los que han disputado cien o más partidos con la zamarra tinerfeña. De entre todos, Ricardo León es el que más partidos suma (227), seguido de Aridane y Suso (127), Javi Moyano (112), Vitolo (104) y el propio Cristo Martín.