Tres puntos de mérito. El Celta volvió a ver la luz en Balaídos y lo hizo tras derrotar al Valencia en un encuentro marcado por la equidad. Un pequeño plus físico le sirvió al equipo celeste para dar un arreón en la segunda mitad y culminar la remontada para inutilizar el tanto inicial de Parejo. El conjunto ‘ché’ se vio mermado por los cambios forzosos, que impidieron a Mathieu y a Ricardo Costa acabar el partido. Charles se erigió como el as del partido. Dos estallidos de calidad en el segundo tiempo acabaron inclinando a favor de los de Luis Enrique el encuentro, haciendo olvidar una gris primera parte.

La presión valencianista fructificó con riesgos en el primer acto

Dos planes y dos estilos se dieron cita en Balaídos. Aunque miembros de la misma promoción, Luís Enrique y Pizzi partieron con dos planteamientos antagónicos. Una lógica que se revolvería en el segundo acto, donde Celta y Valencia parecieron intercambiar sus papeles.

El razonamiento inicial de los valencianos se basó en una fuerte presión. Con una primera línea de jugadores cercando la salida del balón celeste, el equipo visitante logró imponer su hoja de ruta. Pero lo hizo con riesgos. Esta coacción del juego del Celta le llevó a sufrir varias pérdidas de balón, que al jugar con hombres muy adelantados, pudieron costarles el gol en varias ocasiones.

Cualquiera de los dos equipos pudo adelantarse

Pero mientras la fuerza física del Valencia aguantó, su nivel de ocasiones se mantuvo alto. En el 6’ de la primera Piatti tuvo el primer gol luego de una buena jugda de Feghouli por la banda que el argentino fue incapaz de terminar con éxito. Ante las trabas impuestas, el primer intento del Celta llegó de lejos, con Augusto como protagonista, quien envió un lanzamiento seco en el 9’ ante el que Alves reaccionó con seguridad.

A pesar del protagonismo valenciano, un error de Romeu en el minuto 17 pudo costarle a los valencianos la pérdida de la equidad en el electrónico. Charles se aprovechó del desacierto para hacerse con el balón pero el ariete perdió el duelo en el mano a mano contra su compatriota Alves. Esta oportunidad perdida removió la conciencia del avanzado celtista. El remordimiento acabaría por convertirse en su mejor motivación para revolucionar el partido en el segundo acto.

Quien no perdonó fue Parejo. El de Coslada adelantó a los suyos en el 22’ tras rematar un magnífico centro de Feghouli. Llegando desde la segunda línea, se libró de su marca. Su testarazo fue imparable para Yoel.

El gol dejó parcialmente ‘groggy’ al equipo gallego. Tal fue el tambaleo, que el 25’ Jonas rozó el segundo tras una bella jugada invididual en la que dejó sentado a Jonny. Tan solo una intervención crucial del meta ‘celtiña’ evitó la ampliación de las distancias, que hubiese supuesto un golpe casi definitivo.

Con el Celta en un estado de impotencia, el Valencia sufrió el primer revés al perder a Mathieu. El zaguero ‘ché’ dijó adiós al partido en el 38’, cuando fue sustituido por Víctor Ruíz tras no poder seguir en el encuentro por culpa de un encontronazo con Rafinha. Precisamente fue el brasileño el encargado de clausurar el primer tiempo con un zurdazo que saliño lamiendo el palo corto de la portería defendida por Alves.

El mayor fondo físico decidió el partido a favor del Celta

El segundo acto no pudo empezar mejor para el cuadro celeste. Cuatro minutos tardó Charles en firmar la ansiada igualada. Fue tras finalizar con empírica precisión un centro de Rafinha inalcanzable para la defensa y para Alves. Una jugada de tiralíneas hilvanada con mimo desde la banda.

En juego, el período segundo fue menor en juego y ocasiones. Tras quitarse un peso de encima con el tanto del empate, optó por buscar el segundo con calma. Aprisionó el balón en su terreno e imprimió nerviosismo en las filas valencianas. Los de Pizzi bajaron enteros con el paso de los minutos. Este valle en el gráfico de rendimiento fue provocado por una merma física que acabó siendo decisiva.

Charles acabó con una sequía de tres jornadas

Con el cronómetro avanzando peligrosamente hasta el final, las pulsaciones fueron aumentando. Mas el Celta no consiguió aclarase las ideas con la táctica. La ruptura del partido se produjo del único modo posible, con una jugada de clase. Así, en el 77’, Charles se aprovechó  de una pérdida de Guardado para hacer el 2 – 1 . Pero no lo hizo de un modo cualquiera. El brasileño acabó con las dudas del juego celeste y con las suyas con un disparo desde fuera del área inalcanzable para Alves.

Este chut descompuso al cuadro valenciano. La pizarra de Pizzi se oscureció ante el brillo de Charles y el Valencia se vio resignado a intentarlo a ciegas. Con todo, pudo sentenciar Nolito con una jugada marca de la casa. Tras un recorte hacia adentro, infringió un latigazo al palo izquierdo de la portería de Alves.

 Y cuando parecía que los visitantes habían entregado definitivamente el encuentro Feghouli repitió acción y cabeceó a la madera para alivio de Yoel. Canales desperdició el rechace y acabó con las posibilidades de su equipo.

Con estos tres puntos, el Celta sale de los puestos de descenso al llegar a los 19 puntos. El Valencia se aleja un poco más de los puestos de Europa quedando con 23. En la próxima jornada, los de Luís Enrique buscarán sorprender al Espanyol en su feudo mientras que los de Pizzi volverán a hacer kilómetros para viajar hasta Málaga.