El primer partido en Vigo de Berizzo como entrenador no pudo acabar mejor para él. Las sensaciones que dejó el juego del Celta fueron muy buenas; goleada de siete tantos a uno y detalles técnicos que alegraron la vista a los presentes en el campo de Barreiro, aproximadamente unos 1.200 espectadores.

En los primeros minutos del encuentro los jugadores dirigidos por Jorge Otero se vieron obligados a defender con toda la artillería la portería de Ferre. El Celta tocaba bien el balón pero los goles no llegaban. El primero del encuentro lo anotó Cabral en el minuto 23 de juego al cabecear el balón tras un córner. El defensa tuvo que retirarse antes de finalizar la primera parte al sufrir un golpe en el tobillo izquierdo. Él mismo nos comentó tras el pitido final que sólo le dolía un “poquiño”, por lo que no es nada importante.

Al minuto de abrir el marcador, Yelko marcaba el segundo para los celestes y Jorge Otero, entrenador del Rápido de Bouzas, pedía más entrega a sus jugadores con algún que otro rapapolvo. El equipo anfitrión se fue al descanso perdiendo por tres goles tras anotar Charles después de una buena jugada individual.

Larrivey machacó en el segundo tiempo

Tras el paso por vestuarios, Berizzo cambió el once inicial al completo: Jonny fue sustituído por Hugo Mallo, Sergio por Rubén Blanco, Krohn Dehli por David Goldar... Pero si un cambio fue decisivo, fue la entrada de Joaquín Larrivey por Charles. El estreno goleador del argentino con la camiseta celeste iba a ser por todo lo alto.

A la tercera fue la vencida, y por fin Larrivey marcaba después de dos ocasiones claras de gol en las que la puntería fue el único impedimento. A los dos minutos de anotar, Santi Mina le dio el pase del que sería el segundo tanto para el delantero, que consiguió un hat-trick tras haber anotado Sergio Santos de libre directo el único gol de los de Bouzas.

La guinda del pastel la puso Levy Madinda con un golazo por la escuadra en el último minuto tras un pase del ex del Rayo Vallecano, Joaquín Larrivey.
 

VAVEL Logo