La derrota del Celta ante el Ingolstadt 04 en el último choque de los celestes en su gira por Alemania y Austria ha sido lo de menos. El mayor foco de preocupación al término del encuentro ha ido dirigido a Hugo Mallo, que abandonó el césped antes de tiempo con un esguince en su tobillo derecho.

Corría el minuto 65 cuando el lateral de Marín, que entró al inicio de la segunda parte, chocó con un defensor alemán cuando intentaba centrar. Tras una primera exploración, los servicios médicos avisaron al banquillo de que Hugo no podía continuar y fue relevado por Gustavo Cabral.

El Celta no ha desvelado la gravedad ni el alcance de la lesión, limitándose a indicar que queda “pendiente de evolución”. No obstante, no parece que el esguince del marinense sea demasiado grave. Mañana, domingo, la expedición celeste regresará a Vigo y una vez en la ciudad olívica, los servicios médicos podrán hacer pruebas y exploraciones con mayor profundidad. Será entonces cuando el diagnóstico será firme.

Contratiempo en su primera pretemporada normal en dos años

Hace unos días, Hugo Mallo se mostraba feliz de poder hacer la fase preparatoria de la temporada con normalidad. Hace dos años, el canterano no pudo trabajar al nivel del resto de la plantilla debido a la rotura de ligamento cruzado que arrastraba de la campaña 2012/13. La pretemporada pasada, fue una luxación de hombro en el tramo final del curso 2013/14 la que lastró al lateral, que incluso comenzó como suplente la Liga.