A falta de disputarse el Granada-Eibar de esta noche, el Celta es el primer líder del campeonato nacional de Liga, gracias a su victoria a domicilio (1-2) ante el Levante. Una victoria trabajada que dio los primeros puntos de la temporada 2015/16. Pero no todo son alegrías para los celestes: Rubén Blanco no pudo terminar el partido y tuvo que ser sustituido con una lesión en su hombro izquierdo.

Corría el minuto 85 cuando el mosense salió a por un balón aéreo al que también saltó el delanteroo granota Deyverson. El choque entre ambos fue muy violento, pero sin duda Rubén fue el que salió peor parado, al recibir un fuerte impacto en su hombro con la cadera del ariete brasileño. Los gestos de dolor eran evidentes y el Doctor Cota solicitó el cambio. El canterano abandonó el césped con lágrimas en los ojos y Néstor Díaz, portero del filial en la convocatoria por la sanción de Sergio, le sustituyó, debutando así en Primera División.

Los servicios médicos del club confirmaron, ya de vuelta a Vigo, que el joven meta sufre una luxación acromiovascular en su hombro izquierdo. El tratamiento no se hará esperar: el jugador de Mos será intervenido quirúrgicamente esta tarde en el Hospital Vithas Nuestra Señora de Fátima, para posteriormente iniciar un proceso de recuceración que tendrá una duración estimada de entre ocho y diez semanas. Este percance asegura la vuelta de Sergio a la titularidad el próximo sábado contra el Rayo Vallecano y la continuidad de Néstor Díaz en las convocatorias de Berizzo. Así, a modo de efecto dominó, Iván Villar prevé mantenerse en la portería del filial, tal como sucedió el pasado domingo en el debut liguero de los de Torres Gómez ante el Racing de Santander.