Solo unas horas después de recuperar la senda de la victoria ante el Sporting de Gijón en Balaídos, los jugadores del Celta han vuelto a los entrenamientos en las instalaciones de A Madroa. Una sesión de recuperación para los futbolistas que participaron en el encuentro y algo más intensa para los que se quedaron sin jugar. El duelo ante el Almería del próximo miércoles no ha dado respiro a los pupilos de Berizzo, que estarán dos semanas sin días de descanso.

El técnico argentino ha otorgado importancia a la Copa del Rey y, a pesar de que dará minutos a los menos habituales en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, ha trabajado a puerta cerrada hoy domingo a las 10:30 y volverá a hacerlo lunes y martes para preparar el choque de ida de los dieciseisavos de final del torneo del KO.

Aunque se elucubró con que el Celta se quedase concentrado en Andalucía tras el choque en tierras almerienses para preparar el duelo liguero ante el Real Betis del próximo sábado, finalmente no será así y la expedición celeste regresará a Vigo al término del partido de Copa. El jueves a las 10:30, los de Berizzo trabajarán en la única sesión a puerta abierta de la semana. La del viernes volverá a ser a sin público y tras la disputa del choque del Benito Villamarín, los celestes descansarán el próximo domingo.