Claude Makélélé nació en Kinshasa, República Democrática del Congo, el 1973. El naturalizado francés, se le recuerda por haber jugado con algunos de los grandes equipos de Europa del calibre del Real Madrid, Chelsea, PSG, entre otros. También es necesario recalcar que fue una de las piezas claves en la medular de aquel Celta de Vigo liderado por Mostovoi, Míchel Salgado, Revivo y Karpin.

A la edad de tan solo cuatro años, el congoleño tuvo que mudarse cerca de París junto a su familia por cuestiones laborales, ya que su padre, André-Joseph Makélélé, empezaba una nueva etapa como futbolista profesional. Por lo tanto, Claude empezó a interesarse por el fútbol de pequeño gracias a su padre. Como dato curioso podríamos añadir que durante su formación profesional en la adolescencia coincidió con Lilian Thuram, el exjugador del FC Barcelona, en el US Melun. En 1991 fichó por el Nantes con el que ganó la Liga francesa, y en 1997 fue contratado por el Olympique de Marsella en el que estuvo un año. Posteriormente, se dirigió a tierras gallegas, más concretamente en Vigo.

Etapa celeste

Makélélé jugó de mediocentro defensivo, posición que casi siempre ha pasado totalmente desapercibida y que actualmente resulta una de las más prestigiosas y valoradas en el campo, ya que constituye el inicio del juego a través del robo del balón en la medular del campo. Es cierto que no es una tarea muy vistosa dedicarse a recuperar balones, sin duda resulta mucho más llamativo regatear en el borde del área o marcar goles. Sin embargo, es vital contar con la participación de un jugador en el once que se emplee a fondo en cortar el ataque rival antes de llegar a la zona de tres cuartos y que comience la jugada rápidamente. Algunos jugadores actuales de este perfil son Sergio Busquets, N’Golo Kanté y Casemiro, por ejemplo. En ese mismo año en el que Makélélé llegó al Celta, en 1998, los celtiñas consiguieron grandes logros como ganar 3-1 al Liverpool FC en la copa de la UEFA de la temporada 1998/1999. En la siguiente temporada golearon al Benfica por 7-0, obsequiando a su hinchada con una lección de fútbol vistoso a la vez que avisaba del peligro “celtiña” en Europa y venciendo a la Juventus con un contundente 4-0, también en la copa de la UEFA.

Tras dos temporadas de buen fútbol en Balaídos, Makélélé fue un paso más allá en sus intentos constantes de abandonar las filas del equipo vigués. Después de declararse en rebeldía, negándose a entrenar y al ver que estas medidas no eran suficientes para que la directiva lo liberase, el congoleño permitió a su agente, Marc Roger, apedrear el coche del futbolista congoleño para presentar una denuncia falsa en comisaría contando que los aficionados habían atacado su coche. Marc Roger, al cabo del tiempo, confesó que fue él quien lanzó las piedras contra los cristales del vehículo con el consentimiento de su cliente, por supuesto. Finalmente, Makélélé consiguió irse al Real Madrid, dejando una imagen muy poco ejemplar en su salida del club vigués. La cantidad que dejó en las arcas del Celta fueron algo más de 12 millones de euros.

Nuevo milenio, equipo nuevo

En el Real Madrid estuvo tres años, del 2000 hasta el 2003, en los que consiguió ganar dos Ligas, una Supercopa de España, una Supercopa de Europa, una Copa Internacional y una Champions League antes de marcharse al Chelsea, donde coincidió con Mourinho. En el club merengue, Makélélé se acabó de consagrar como un pulmón básico para la medular del equipo blanco hasta que en verano de 2003, el jugador congoleño pidió un aumento de sueldos, ya que era uno de los jugadores peor pagados de la plantilla pese a ser uno de los que más aportaba en el campo, a lo que el Madrid se negó. El Chelsea FC, finalmente, pagó por él algo más de 16 millones de libras esterlinas para dar carpetazo a los rumores alrededor de la relación entre Florentino y Claude Makélélé. En su primera temporada en Stamford Bridge, José Mourinho afirmó que el naturalizado francés había sido el mejor jugador del año, ya que encajó muy bien en el sistema de juego del equipo inglés. Finalmente, Claude Makélélé tras regresar a Francia colgó sus botas en el PSG en 2011. En cuanto a los partidos con la selección, Makélélé disputó 71 partidos oficiales representando a Francia.