El partido estuvo totalmente dominado por el conjunto califa en todo momento a excepción de los primeros 15 minutos de la segunda parte. A continuación se van a analizar cuáles fueron las claves del partido.

Vuelta al once titular

Tras varias lesiones o sanciones, el Córdoba llevaba muchas jornadas variando continuamente el once titular, sobre todo en la zona defensiva. Ante el Mallorca volvió la defensa titular con Cisma y Stankevicius en los laterales y Rodas y Deivid en el centro de la zaga. Todos demostraron un gran nivel y compenetración lo que hizo que al Mallorca le costara mucho crear ocasiones de peligro para la meta de Razak. Cabe destacar el partido de Deivid, sobre todo en la salida de balón.

Gran nivel de la dupla atacante

Cuando estos dos delanteros están en buena forma y en racha son casi imparables. El nivel del Xisco y de Florín es muy alto y con los goles de ambos se encauzó el partido en la primera  parte. El trabajo y la presión constante de Florín unido a la calidad y ayuda al centro del campo de Xisco le hace a esta delantera muy necesaria, no sólo para el ataque, sino también para el entramado defensivo del equipo. 

El preocupante estado de forma de Fidel

Fidel lleva dos partidos a un nivel preocupante. Se le nota sin la chispa de hace tan sólo un mes y nadie entiende muy bien el porqué de esta situación. La primera parte del onubense fue bastante mala, apenas desbordó por banda y estuvo muy impreciso tanto en el pase como en tareas defensivas. En la segunda parte se entonó algo más y le salieron algunos regates habituales en el habilidoso extremo. Sin embargo tuvo que ser sustituido en la segunda parte por un gran Pedro Ríos.

Con los cambios llegó la tranquilidad

Oltra realizó los cambios necesarios para el equipo. Introdujo a Markovic en el centro del campo en lugar de Xisco, y el serbio, aparte del gol, aportó más control en el centro del campo y tapó los espacios que se habían creado en la segunda parte. Markovic se posicionó detrás del punta y a Luso lo retrasó un poco poniéndolo más cerca de la zaga. Con la entrada del serbio el partido dejó de peligrar. La entrada de Pedro Ríos le dio al Córdoba frescura en la zona atacante para la parte final y le dio mucho más peligro en el contragolpe. Apunto estuvo Ríos de anotar el cuarto gol tras una gran jugado colectiva del equipo califa. Por último el cambio de Raúl de Tomás por Florín paró el partido en los minutos finales y dio descanso y protegió al rumano ante una posible tarjeta amarilla que le haría perderse el siguiente partido ante el Almería.