Por el Córdoba CF han pasado jugadores con un valor incalculable, que tal vez el club no ha sabido recompensar o aprovechar más en el momento indicado y que después dan un salto de calidad en su siguiente destino. Uno de ellos es Pedro Antonio Sánchez Moñino, más conocido como Pedro, quien está siendo una pieza clave en el Real Zaragoza, al igual que lo fue en su etapa blanquiverde.
Magia y calidad en sus pies
Desde que empezó a destacar en Segunda División con el Real Murcia, Pedro ha demostrado saber que hacer en cada momento por las bandas jugando como extremo, aunque también ha dado más de una clase magistral como mediapunta tanto en el Córdoba como en el Zaragoza.
Su juego le ha permitido ser un referente goleador en cada equipo en los que ha estado. En el Real Murcia dejó 19 tantos en los más de 70 partidos que disputó y posteriormente 13 goles en los 80 encuentros que vistió la camiseta blanquiverde. Actualmente, lleva ya diez con el Zaragoza, y es una de las piezas claves del equipo, no solo por los tantos anotados, sino por todo lo que aporta a sus compañeros y los grandes pases que deja para que marquen, como así lo acreditan las 13 asistencias, cinco de ellas en esta campaña.
Su historia blanquiverde con un final poco merecido
La llegada al Córdoba de Pedro supuso un plus en las bandas para los blanquiverdes, y en eso siempre se fijaron sus entrenadores ya que fue un fijo para la mayoría, faltando solo por alguna molestia o sanción.
Durante las dos temporadas que jugó vistiendo la camiseta califal, este extremo alicantino supo también ganarse a la afición, que en más de una ocasión acabaría coreando el nombre del jugador en el Estadio Nuevo Arcángel.
Pero si hubo un momento en el que Pedro demostró su calidad, fue en la temporada 2013/2014, donde sería uno de los líderes del Córdoba en su lucha por el ascenso. Tanto sería así, que hasta marcaría a su antiguo equipo en la primera eliminatoria de playoffs por el ascenso en la Nueva Condomina.
Tras conseguir el ansiado ascenso, muchos pensaban que Pedro continuaría en la plantilla para ayudar al Córdoba en su nueva aventura en la Liga BBVA, pero ante la sorpresa de la afición, no se renovó el contrato del extremo y tuvo que poner rumbo a un nuevo club, el Real Zaragoza.