No todos los fichajes salen como uno quiere, y este puede ser el caso de Jean Paul Pineda. Su llegada a la ciudad de Córdoba el pasado verano levantó cierto revuelo por su etiqueta de delantero goleador en Chile, pero se está evidenciando que no es así en otros tipos de ligas.

El pasado fin de semana se cumplió una vuelta completa para el delantero chileno sin marcar gol, y es que su último tanto fue frente al CD Lugo en la octava jornada, a principios de octubre. Mucho tiempo sin marcar gol para un jugador, que a pesar de contar con pocos minutos, ha tenido bastantes partidos para hacerlo.

Relegado al banquillo por la mayoría

A su llegada al Córdoba parecía que podía ser uno de los delanteros punteros del conjunto blanquiverde, pero jornada a jornada ha ido cayendo en la lista de preferibles de Oltra.

En un primer lugar fue superado por Florin Andone y Xisco, quienes son a fin de cuentas los delanteros más importantes del equipo, pero conforme fueron pasando las jornadas ha sido Raúl de Tomás quien le ha quitado los minutos.

Pero la última muestra de desconfianza hacia él fue en el partido frente al CD Lugo en el Nuevo Arcángel. Ya estaban por encima de Pineda los otros tres delanteros del Córdoba CF, pero en la segunda mitad, ante la falta de juego ofensivo del equipo, José Luis Oltra dio entrada a otro delantero distinto, Moha Traoré, quien juega en el Córdoba B y ha ido ganándose la confianza del entrenador en cada entrenamiento.

¿Mismo caso que Havenaar?

Esta situación puede recordar a una parecida que ocurrió en el Córdoba CF la pasada temporada a su llegada a la Liga BBVA con el delantero Mike Havenaar.

Havenaar salta por un balón con Ramos

El jugador holandés, con la nacionalidad japonesa, llegó como gran pilar fundamental en la delantera blanquiverde, pero poco a poco fue perdiendo esa fama y quedó relegado al banquillo.

Ambos casos podrían parecerse, pero también es verdad que Havenaar se fue en el mercado de invierno, mientras que José Luis Oltra ha decidido mantener a Jean Paul Pineda en la plantilla, ya que nunca se sabe cuando se adaptará del todo y podrá rendir al nivel que se espera de él.