Partido complicado el que se iba a vivir en el Palamós a la par que histórico por ser la primera vez que pisaba su césped el equipo califa. Una visita muy importante y difícil para los jugadores de José Luis Oltra, que necesitaban los tres puntos para continuar en la lucha por ascender.
Sonaba el pitido inicial y el Córdoba salió con todo. Los primeros minutos era un dominio abrumador el que tenía y en varias ocasiones pudo adelantarse con distintas jugadas, pero René y la mala suerte hicieron que el marcardor se mantuviese a cero por el momento.
Pero la mala suerte parecía estar adueñada del conjunto de Oltra y, sin haber creado ninguna ocasión hasta el momento, el Llagostera iba a conseguir adelantarse en el marcador tras un cuarto de hora de partido. Con un grandísimo pase de Pitu desde muy lejos, Deivid habilitaría la jugada para que Imaz se quedase solo frente a Razak y conseguiría marcar sin mucha dificultad.
El palo era enorme para el equipo de Oltra y eso se notó en los siguientes minutos, donde la inseguridad se apoderó de los blanquiverdes y el Llagostera aprovechó para adueñarse del balón. Pero esto sería un mero espejismo, ya que minutos más tarde volverían a reaccionar para volver a subir en tropel a la portería de René.
Mediante Xisco y Florin, el Córdoba comenzó a recortar metros de nuevo pero la mala suerte seguía apoderada del equipo y en los últimos metros no conseguía el gol que tanto necesitaba y por el que se escuchaban los cánticos de la afición blanquiverde que hasta allí se había trasladado. Con esta frustración llegaría el pitido final de la primera mitad, con un Córdoba ansioso de gol pero impotente ante la situación, y con un Llagostera que luchaba por los tres puntos que le acercaban más a la salvación.
René puso un muro en su portería
La segunda mitad comenzaría con unos locales más metidos y más frescos buscando hacer daño al Córdoba e intentar sentenciar, pero Natalio y Juanjo no conseguirían ver puerta entre las actuaciones de Razak y la mala puntería.
A partir del minuto 60 llegarían los cambios blanquiverdes buscando más juego ofensivo, pero no por meter más delanteros o jugadores que desequilibran implica que un equipo marque goles. Esto mismo fue lo que le ocurrió a equipo de Oltra, daba igual quien entrara porque las ideas y la definición era la misma, por lo que la portería de René seguía a cero.
Los minutos iban pasando y la frustración se adueñaba de los blanquiverdes, que veían otra vez alejarse los puestos de ascenso, y con más corazón que cabeza seguían intentando marcar, pero la defensa no permitía entrar a los delanteros y cuando lo hacían el guardameta estaba muy seguro.
Con todo esto llegarían los minutos finales y ni con todo el equipo metido en el área conseguían marcar. Las dos fuerzas que se enfrentaban eran las ganas de ascender frente a la necesidad de seguir en la Segunda División, y serían estás últimas las que vencerían finalmente.
Derrota que trae de nuevo las dudas al Nuevo Arcángel que ve como se queda a tres puntos del Osasuna, quien pone el límite de los playoffs, y se le complican las opciones de cara a las últimas cuatro jornadas, donde son muchos equipos los que optan al ascenso y en esta jornada cae a la décima posición. Esta semana deberá verse que ocurre en los entrenamientos y cómo afrontan el partido frente al Elche porque las oportunidades se van acabando y otra derrota le cerraría posiblemente las puertas de Primera División al equipo de José Luis Oltra.