Era el año 2011 cuando, en el ya legendario Barcelona de Pep Guardiola, el actual técnico del Bayern daba la oportunidad de debutar en Primera División y en Champions League a un joven jugador de 19 años. Era Isaac Cuenca López (27/04/1991), que de esta manera lograba cumplir uno de los objetivos que sueña cualquier inquilino de la Masía.
Su estancia en el Barça, del sueño al baño de realidad
Sin embargo, el camino recorrido por Isaac para conseguir este estreno en la máxima categoría del fútbol español y en Europa no fue para nada sencillo. Natural de Reus, su viaje con destino al balompié profesional comenzó cuando en el 2003 y con 12 años ingresó en la academia del F.C. Barcelona; distinguiendo dos etapas durante su aventura blaugrana: al tercer año de estancia en la Masía, Isaac, sorprendentemente, decidió renunciar y unirse al equipo de su localidad, el Reus Esportiu, un período cuyas buenas actuaciones significaron su regreso al equipo ya comandado por Guardiola en el 2009. Aún así, el proceso de integración a la disciplina culé resultó ser costoso: tras pasar la temporada 10/11 cedido en el Sabadell, no consiguió debutar con el filial del club catalán hasta el mencionado 2011, año que sin duda significó un antes y un después en su carrera deportiva.
Con 19 años consiguió debutar en Liga y Champions de la mano de Guardiola La primera parte de la temporada 11/12 implicó para el joven Isaac el salto definitivo al fútbol de primer nivel. Sus más que decentes partidos pero sobre todo la técnica individual que demostraba gozar en sus botas le permitieron ser de la partida de los de Pep en varias ocasiones, hasta el punto de que el club blaugrana trabajó inmediatamente en su renovación y su inclusión definitiva en el primer equipo hasta el año 2015, para así atar al que parecía uno más de los grandes productos de la Masía de los últimos años.
Sin embargo, lo que parecía un sueño cumplido se tornó meses después en un choque directo con la realidad. Nada más comenzar la siguiente temporada, una inoportuna lesión de rodilla truncó sus aspiraciones de consolidación en el Barcelona, hasta el punto que una vez recuperado y al cien por cien fue cedido al Ajax de Amsterdam en una clara intención del club en aquellos momentos dirigido por Sandro Rosell por buscarle unos minutos que en el Barça no podría tener debido a su inactividad; y fue en los Países Bajos donde su rodilla volvió a avisarle. Una nueva lesión le dejó así en el dique seco hasta octubre del pasado 2013, condenándole nuevamente a una temporada de inactividad destacada, ya que nuevamente el Barcelona continuó sin solicitarle sus servicios. De esta manera, al final del curso futbolístico 13/14, el de Reus y la directiva culé decidieron por mutuo acuerdo rescindir el anteriormente mencionado contrato que unía a ambas partes hasta 2015.
La técnica y habilidad con el balón, sus puntos fuertes
Isaac Cuenca, centrando ya las miradas en su capacidad como futbolista, es un extremo puro disponible para jugar tanto en la izquierda como en la derecha, fruto del dominio del esférico que tiene con ambas piernas (ambidiestro). Como jugador de banda que es no destaca por su velocidad punta, pero su facilidad para regatear y sortear rivales es lo que sin duda le convierte en un elemento importante a la hora de asaltar el área del contrincante. Además, destaca su capacidad de entrega, lo cual une a uno de sus mayores defectos: la falta de resistencia física, siendo probable que en su nueva aventura como blanquiazul no aguante los noventa minutos en varios compromisos. Es un extremo habilidoso y técnico, pero con poco fondo físico Por otra parte, si a ello se le suma la posibilidad de una recaída de su rodilla, si Isaac logra terminar la temporada sin sufrir lesiones se podría hablar de casi un milagro. Nunca destacó como un extremo con gol, más bien todo lo contrario, ya que presenta más preocupación por asistir a los delanteros que por fabricar su jugada; lo que no significa que a la hora de ver clara una acción individual no la lleve a cabo con toda la efectividad que sea capaz de ofrecer.
En resumen, el Deportivo se agencia para la temporada 14/15 a un jugador de calidad, no hay más que ver sus actuaciones en el Barça de Guardiola cuando éste era de la partida para darse cuenta. Su titularidad en el equipo blanquiazul estaría casi asegurada, ya que en estos momentos las bandas son las zonas con más refuerzos pendientes de este Dépor; siendo tal vez el flanco derecho el que tenga que ocupar. Así, tras casi diez años perteneciendo al F.C. Barcelona, el jugador de Reus tendrá en A Coruña una nueva oportunidad para demostrar su potencial y la proyección que sin lugar a dudas aún tiene en sus botas.