La falta de minutos de Seoane y Juan Carlos en la Liga BBVA, propició que tanto los jugadores como el club buscasen alternativas en el mercado invernal. Esto llegó en forma de cesión para el primero y mediante una opción de carta de libertad con opción de recompra para el segundo. Además, la incorporación de Saúl motivó que se utilizará la estrategia de mantener al jugador cedido hasta final de temporada en el equipo dónde lo había adquirido el club coruñés.

Los tres jugadores han tenido un papel destacado en sus conjuntos y es necesario desgranarlo.

Diego Seoane se afianza en el Lugo

El canterano tuvo una actuación destacada la pasada campaña en la Liga Adelante. Llegó a disputar 24 encuentros. En muchos de ellos jugó a pierna cambiada y cumpliendo con creces, pero sus méritos no fueron suficientes para ganarse un puesto en el equipo titular en primera división.

Quizás con Fernando Vázquez otro gallo cantaría, pero con el técnico maño no tuvo opciones de jugar. Y no es descabellado decir que Víctor Fernández no "congenió" demasiado bien con los canteranos coruñeses. Insua y Juan Domínguez dejaron entrever en sus declaraciones de los últimos días, la poca confianza que el maño les profesaba. En una situación similar se encontraba Seoane.

El Ourensano vio como su papel en el equipo iba menguando y decidió cambiar de aires para seguir progresando en su carrera. El Lugo se interesó por él y se reencontró con Luis Fernández. Su condición de jugador polivalente por ambas bandas, jugó a su favor. Quique Setién lo hizo un fijo en sus alineaciones y no solo destacó en defensa sino que se prolongó con criterio al ataque.

El Lugo consiguió el objetivo y salvó la categoría, y Diego Seoane logró tener los minutos y la confianza que no había logrado en Riazor, a pesar de estar lesionado durante un período importante te tiempo. En total jugó 9 partidos, salió de inicio en los 9. Disputó 734 minutos en los que recibió 2 cartulinas amarillas y una roja. A pesar de que pueden parecer pocos partidos, es necesario mencionar que fue titular en todos ellos, y si las lesiones lo hubiesen respetado probablemente hubiese jugado un mayor número.

El club lo ha citado para comenzar la pretemporada el 2 de julio. Su buena actuación en Lugo, sumado al papel importante de la campaña pasada con el Dépor y de la anterior en Córdoba, dejan entrever que el tiempo de las cesiones se ha acabado para el futbolista. Es hora de que el técnico apueste por él desde el inicio. Además, la probable incorporación de Manuel Pablo al staff y la renuncia a mantener a Juanfran le abren las puertas para competir por un puesto junto a Laure. Habrá que esperar para ver si Víctor decide apostar por él o no.

Juan Carlos buscó su sitio

Juan Carlos Real estaba llamado a ser importante en el Deportivo. En sus inicios se le comparó con Valerón y a falta de un heredero claro que no llegó con Juan Domínguez, se entronizó al coruñés. Alternó protagonismo en el Fabril con partidos en Copa del Rey con el Dépor, y poco a poco fue aprendiendo de los "mayores".

En la temporada 2012-2013, mientras el Deportivo luchaba por no descender en primera con un equipo plagado de cedidos, se le buscó acomodo en el Huesca. Allí demostró que podía jugar en la Liga Adelante, por lo que en la temporada siguiente se le dio la oportunidad de hacerlo con el Dépor. Disputó 28 partidos en la Liga Adelante y pese a que algunos lo tildaban de falta de intensidad, cuajó grandes actuaciones.

Pero el premio no le llegó en forma de continuidad y se le cerraron las puertas para jugar con su equipo en la Liga BBVA. Intentó demostrar que tenía un hueco pero tan sólo fue convocado en 4 ocasiones y disputó dos partidos partiendo desde el banquillo. Curiosidad o no, ambos se saldaron con victoria. Su pugna se alargó hasta enero, cuándo le dejó claras al club sus intenciones de salir. Se resolvió con el traspaso del jugador al Tenerife, un contrato que le duraría hasta el día 30 del presente mes. Pero el Deportivo se reservaba una opción de recompra por si quería repescar al coruñés.

En Tenerife compartió vestuario con su excompañero Diego Ifrán.  Desde enero jugó 19 partidos, partió de titular en 11 y de suplente en 8. En total acumuló 929 minutos en los que vio 2 cartulinas amarillas y anotó un gol en la última jornada. Su equipo salvó la categoría.

El conjunto coruñés no ejerció la opción de recompra, y aunque aún tiene tiempo de hacerlo todo parece indicar que no lo hará. Sobre todo atendiendo a las palabras de los miembros encargados del área deportiva. Habrá que desearle suerte y esperar para ver que será de su futuro y si algún día llegará a vestir de nuevo la camiseta deportivista.

Temporada completa para Saúl

El caso de Saúl García es distinto al de los jugadores ya mencionados. El lateral zurdo es canterano del Racing de Santander, equipo que poseía su propiedad hasta el pasado mes de enero, cuándo el Deportivo de La Coruña pugnó por hacerse con sus servicios y se llevó el gato al agua.

El Dépor ató al joven defensa por cuatro años y medio, y decidió que siguiera cedido en su club de origen hasta finalizar la vigente temporada. Se convertía en el primer fichaje de los coruñeses para la campaña 2015-2016.

Era la segunda temporada que el cántabro había disputado con el primer equipo y su calidad por la banda izquierda no había pasado desapercibida ni para propios ni para extraños. La pasada temporada disputó 23 partidos en total contando la liga de Segunda División B y la Copa del Rey, pero este año logró alcanzar una regularidad importante, aunque quizás en Santander lamentaron que no diera un paso al frente y destacara más en su progresión.

El balance del jugador para la temporada que acaba de finalizar se salda con un total de 36 partidos disputados, saliendo como titular en 28 y como suplente en 8. Ha recibido 6 tarjetas amarillas en los 2459 minutos jugados. En lo colectivo, el Racing no logró mantenerse, pero en lo individual logró ser un jugador importante y recurrente en las alineaciones de su equipo.

Ha sido citado para empezar la pretemporada con su nuevo equipo, el Deportivo de La Coruña, pero la buena campaña de Luisinho y la posibilidad de reforzar en el mercado esa posición o de que otros jugadores polivalentes la ocupen, le cierran las puertas del primer equipo y probablemente salga cedido para ir acumulando minutos y experiencia, pero habrá que esperar para ver que decide hacer con él su técnico Víctor Sánchez.