El Deportivo de La Coruña dio el pasado sábado su peor versión ante el Espanyol. Jugó uno de sus peores partidos en lo que va de temporada. Apenas pudo crear peligro en ataque, se le vio muy nervioso en defensa y superado por su rival, que practicó un fútbol muy intenso, en muchas fases del encuentro. El equipo de Víctor está entrando en una dinámica muy mala de resultados de la que deben salir lo más pronto posible. Necesitan ganar rápidamente para no verse agobiados e intentar lograr un cambio de rumbo.

Cambio de esquema debido a las bajas

Durante la semana previa al encuentro, llegaba lo que sería un gran inconveniente de cara a este partido; puesto que se confirmaba la ausencia de Lucas Pérez ante el Espanyol. La baja del máximo goleador deportivista era un problema realmente importante de cara a intentar llevarse los tres puntos en Barcelona; ya que el jugador franquicia de este club no iba a poder disputar el encuentro. También era importante la baja de Cani, tras lesionarse en el último encuentro en Riazor ante el Betis. El mediapunta maño estaba empezando a entrar en las alineaciones de Víctor y esta baja suponía otro duro revés para el técnico herculino.

Para solucionar el problema de estas dos bajas, Víctor decidió cambiar su ya habitual 4-4-2 por una especie de 4-3-3, formando un trivote con Bergantiños, Mosquera y el recuperado Celso Borges en el centro del campo; y poniendo a Oriol Riera como delantero referencia del ataque coruñés, acompañado en las bandas por Luis Alberto y Fajr. La defensa se mantenía como siempre. Una defensa que ya conocemos de memoria esta temporada: Lux, Juanfran, Arribas, Sidnei y Fernando Navarro. Una defensa que iba a sufrir un duro varapaloa mediada la primera mitad.

Lesión de Sidnei y defensa de circunstancias

El partido comenzó y el partido estaba siendo muy disputado, sin muchas ocasiones claras, pero con un fútbol muy intenso. Si había un defensa que estaba incordiando especialmente al delantero ecuatoriano Felipe Caicedo, principal peligro perico, ese era Sidnei. El brasileño estaba ganando sin muchos apuros a un portento físico como el delantero del Espanyol, pero a los 25 minutos tuvo que salir del campo debido a una lesión. Baja importantísima para el Dépor, que perderá a su baluarte en defensa durante aproximadamente un mes y que veremos en los próximos partidos como lo soluciona Víctor Sánchez del Amo. El sábado solo fueron convocados dos centrales, por lo que la lesión de Sidnei hizo que Fernando Navarro dejara la banda izquierda, situándose Laure en esa banda, donde no ofreció sus mejores prestaciones. Este cambio fue uno de los errores que cometió el técnico herculino en el encuentro.

Inoperancia en ataque

El partido dio un vuelco tras la lesión de Sidnei. Al Dépor le entraron las dudas y fue en el primer tramo de la segunda parte cuando se adelantó el Espanyol con un gol de Marco Asensio. El Dépor tenía la posesión, con el esquema que dispuso en el campo era fácil que tuviera la pelota ante un Espanyol que suele jugar a la contra. Con Fajr y Luis Alberto en las bandas y con el trivote puesto en el campo, el Dépor tenía muchos jugadores en el centro del campo, pero no abrían el campo lo suficiente ya que los jugadores de banda tendían a moverse hacia dentro. Por si fuera poco, Laure a pierna cambiada ofrecía muy poco en ataque, y se sentía incómodo con su posición en el campo.

Intentar generar peligro por la zona central del campo, tenía a un claro perjudicado: Oriol Riera. El ariete catalán pegaba poco en este sistema implantado por Víctor, puesto que al no usar mucho las bandas, el protagonismo de Oriol merma bastante. Él es un delantero clásico, con poca capacidad de combinación y que vive básicamente de los centros que le pongan, que ante el Espanyol no fueron muchos. Aun así, se notó que Riera no está ni mucho menos con confianza, apenas gana balones aéreos y sigue negado de cara al gol. Solo tuvo una buena ocasión en un córner en el que no puedo encontrar el gol. Probablemente, puesto que tampoco sabemos en que condiciones físicas se encontraba Jonathan Rodríguez de cara a este partido, el delantero uruguayo era una mejor opción para la idea que tenía en mente el conjunto deportivista.

Dos cambios en lugar de uno

Como ya se ha mencionado antes, la entrada de Laure en el lateral izquierdo no dio el resultado esperado por Víctor, que más adelante tuvo que dar entrada a Luisinho en lugar de Juanfran, con el fin de solucionar este error. El portugués se situó en la izquierda y Laure volvió a su posición más habitual, el lateral derecho. De esta forma, se podría decir que el Dépor gastó dos cambios para sustituir a Sidnei. No son las sustituciones el punto fuerte del técnico deportivista, y esto es algo en lo que debe mejorar en el futuro.

Víctor prepara mucho los partidos durante la semana y el planteamiento inicial no suele ser malo, pero una vez iniciado el encuentro, sus decisiones no siempre parecen ser las idóneas. Suele tardar en realizar las sustituciones, que tampoco le suelen dar un buen resultado. Incluso algunas veces parece que ha realizado un poco tarde los cambio. Hay que recordar que Víctor está en su primera temporada como entrenador, por lo que está en un proceso de aprendizaje. Irá mejorando, porque de los errores se aprende.

Regreso de Celso Borges y un Lux pletórico

No todo son aspectos negativos sobre este encuentro. Una de las notas positivas del encuentro la puso Celso Borges. El costarricense volvió a los terrenos de juego tras una larga ausencia. No tuvo el mejor de sus partidos, eso está claro. Se le notó con una marcha menos respecto a sus compañeros de equipo, aún le queda un poco para que veamos su mejor versión. Buenas noticias para un Dépor que no anda muy sobrado de centrocampista precisamente; por lo que recuperar a un jugador que ha sido tan importante en el inicio de la temporada y que, además, puede ofrecer más variantes tácticas como el 4-3-3 que vimos el sábado, es un motivo para que se alegre la parroquia coruñesa.

El que fue sin duda el héroe del encuentro fue Germán Lux. El cancerbero argentino hizo un auténtico partidazo. Dio un verdadero recital con intervenciones de mucho merito ante el Espanyol. Detuvo casi todas las ocasiones del conjunto perico y solo Marco Asensio consiguió batirle, aunque el portero del Dépor llegó a tocar el disparo del habilidoso mediapunta blanquiazul. Lux se está ganando a pulso una renovación de contrato con el club herculino con actuaciones como esta. Hay que recordar que los cuatro porteros del Deportivo de La Coruña, Fabricio, Lux, Pletikosa y Manu, acaban contrato a final de temporada. Pletikosa y Manu no parece que vayan a ser parte de los planes de Víctor de cara a la próxima temporada, y la renovación de Fabricio es casi una misión imposible; por lo que Germán Lux parece ser el único de los cuatro con opciones reales de seguir ligado al club tras acabar esta campaña.

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