El Éibar cayó en casa contra el Tenerife en un partido crucial por los puestos de ascenso. Ipurúa estaba de celebración y se llenó para celebrar los 1000 partidos de la entidad en la categoría de Plata. El equipo quería corresponder a la afición y regalar los tres puntos para conseguir el colchón suficiente para afrontar la recta final de la competición con comodidad, pero no pudo ser.

El partido comenzó con el equipo armero echado para adelante, los aficionados alentaban a los jugadores para que se alzaran con la victoria y éstos pronto les correspondieron. En una falta botada desde el lateral izquierdo del campo, Bóveda cabeceó el balón al fondo de las mallas adelantando al equipo en el minuto 7 de partido. Después del tanto local los visitantes se veían obligados a remontar pero el partido era un toma y daca por parte de los dos equipos.Yuri tuvo la oportunidad de marcar un segundo gol, pero su disparo pegó en Javi Moyano y se fue a corner. No tuvieron ocasiones claras ninguno de los dos y tampoco nada que reprochar a los once. El visitante Edgar pudo empatar en un tiro a bocajarro, pero pegó en un defensa, que evitó el gol del empate antes del descanso. El primer tiempo terminó con el equipo local siendo mejor en su juego y adelantado en el marcador, pero en la segunda parte los armeros no correrían la misma suerte.

La segunda parte comenzó con gran madurez por parte de los dos equipos, pero en una jugada a balón parado, esta vez de mano del Tenerife, se igualó el marcador. Una falta botada en el lateral derecho del campo fue ligeramente cabeceada por Bruno y con ayuda del sol hizo el 1-1 en el minuto 55. Xabi, el portero eibarrés, no pudo responder ante el cabezazo del isleño y la verdad, el sol que estaba de cara no le ayudó mucho. Más tarde con varias ocasiones aunque poco claras, Aridane con un gran disparo a la escuadra adelantó al Tenerife colocando el 1-2 final en el marcador. El gol fue un varapalo para los armeros que no supieron conseguir la igualada.

El equipo guipuzcoano acusó la lesión de Bóveda, que llegó cuando Gaizka Garitano había hecho los 3 cambios, así que dejó al equipo con 10 hombres. Más tarde en la protesta de un penalti Yuri vio la segunda amarilla y el Éibar se quedó con 9. El marcador no se movió hasta que se pitó el final aunque Arruabarrena tuvo la útlima con una volea en el descuento que se marchó por poco.

El choque tambien tuvo polémica, el equipo local pidió penati en dos ocasiones pero el colegiado no señaló la pena maxima en ninguna de las dos ocasiones. La primera una mano que parecía clara, pero que más tarde se vio como no golpeo en el brazo del defensor y en todo caso involuntaria. En la segunda ocasión, el jugador local, Yuri controló un balon que venia del cielo pero el esferico golpeo en el hombro del tinerfeño que supo adelantarse a la ocasión. Yuri protestó al arbitro una mano que a su parecer era clara, pero no era más que una protesta fruto de la frustación del equipo, que veía como se esfumaban los tres puntos. El colegiado Ocón Arraiz realizó un gran partido, no influyó para nada en el encuentro y acertó en los dos penaltis.

Asi terminó la trigesimo cuarta jornada de la Liga Adelante para el Éibar. El coque era crucial para el equipo pero los errores y la mala suerte decantaron la balanza para los isleños. Con esta derrota los armeros siguen segundos pero a un punto de Las Palmas y a cuatro de los cinco siguientes equipos. No deben descuidarse si quieren conseguir el ansiado ascenso a la categoria de oro, ya que en el último tramo liguero es cuando los equipos aprietan para cumplir los propositos de la temporada.La segunda división esta siendo muy competitiva este año, cualquiera de los equipos puede meterse en puestos de ascenso.