Paso atrás importante del Eibar en su objetivo por permanecer en la Liga BBVA. El conjunto armero perdió merecidamente ante un Almería que fue muy superior y que iguala con 31 puntos en la clasificación al equipo azulgrana. Todas las derrotas son duras, pero ésta lo es más, por el hecho de tratarse de un rival directo y de producirse a estas alturas de la temporada.

Gaizka Garitano realizó varios cambios en el once titular con respecto al partido frente al Celta. La presencia en la alineación de Ekiza y Boateng fueron las dos novedades más significativas de un once del que se cayeron Añibarro y Dani García. La velocidad y el poderío físico del Almería fue el motivo por el cual el técnico deriotarra decidió decantarse por el centrocampista africano.

El Eibar pagó muy caro su mala entrada en el partido. Al equipo guipuzcoano le costó entrar en el choque y cuando quiso hacerlo, ya perdía por 1-0. Los hombres de Sergi Barjuán salieron con las ideas muy claras y con la intensidad que requería un partido tan importante como éste. El Almería se adueñó de una posesión que el cuadro azulgrana no quiso discutirle, ya que apostó por replegarse y salir al contragolpe. 

El Eibar pagó muy caro su mal inicio y cuando quiso reaccionar ya perdíaLos locales asestaron el primer golpe en su primera aproximación al área y fue en una rápida transición tras un saque de esquina mal efectuado por el Eibar. Thievy culminó un contragolpe de libro con una diagonal hacia dentro y un disparo potente, inalcanzable para Xabi Irureta. Una jugada que demostraba el peligro del Almería con espacios y la velocidad de sus hombres de ataque.

Al Eibar le costó sobreponerse al tanto inicial, pero poco a poco fue haciéndose al partido. Los armeros consiguieron sobrepasar los cuatro pases seguidos que no eran capaces de realizar en el primer tramo del partido. Sin embargo, la falta de creatividad fue patente y la ocasión más clara de gol llegó en un disparo lejano de Manu del Moral que detuvo Rubén. 

El Almería dio un paso atrás y prefirió plantear una defensa posicional que el Eibar no era capaz de superar. De sobra es conocida los problemas que tienen los armeros a la hora de atacar en posicional, de ahí que las jugadas a balón parado y los contragolpes sean los dos elementos con los que suelen generar peligro en ataque. Pero el Eibar no hizo daño con espacios y tampoco sacó partido de la estrategia.

El descanso llegó cuando mejor estaban los armeros. Al Almería le vino de maravilla el parón y en la reanudación repitió el buen inicio de la primera mitad. De hecho, Thievy estuvo a punto de marcar el segundo tanto después de que Jonathan Zongo hiciera gala de su velocidad dejando atrás a Dídac Vilá para servir un balón que el delantero congoleño estrelló sobre el larguero.

Garitano movió ficha y apostó por dotar al equipo de altura con la entrada al campo de Lekic y Piovaccari. A falta de profundidad, el entrenador vizcaíno decidió optar por buscar un juego más directo y dominar las jugadas de estrategia en la que se estaban imponiendo los locales. Los cambios no tuvieron el efecto deseado en un Eibar gris y sin ideas en ataque.

Los armeros fueron fieles a su identidad, pero se encontraron con un Rubén inspiradoPor el contrario, Sergi sí que dio con la tecla. Wellington Silva entró al campo y en su primera acción provocó una falta dentro del área de Dídac, que en una semana ha sido el autor de los dos penaltis en contra de su equipo. Verza se encargó de transformarlo con un tanto de suerte, ya que Irureta llegó a tocar el balón, pero no pudo evitar que entrara en la portería.

El 2-0 parecía definitivo con 20 minutos largos por delante. Los armeros, fieles a su identidad, siguieron buscando con empeño el gol, pero se encontraron con un Rubén muy entonado. El guardameta local evitó que el Eibar recortara distancias en un gran disparo de Piovaccari con una intervención aún mejor. Esa fue la ocasión más clara de los eibarreses ante un Almería que no sufrió demasiado en los últimos minutos.

Los andaluces igualan en la clasificación con 31 puntos al equipo de Garitano. El gol average favorece a los armeros, que deberán reaccionar en los próximos encuentros ya que ahora sí que los puestos de descenso están muy cerca. El Eibar afronta una semana complicada en la que recibe al Sevilla el miércoles y visitará al Valencia el domingo y ganar en Almería hubiese ayudado a afrontar con más tranquilidad ambos partidos. No queda otra trabajar y levantarse. Nadie dijo que esto fuera a ser fácil.