La temporada de Stuani ha sido igual de irregular que la del equipo. Empezó bien, se vino a menos y salvó el año de puro milagro. Pero le servirá para ser mundialista. Es un mérito notable, y todo apunta a que en el mundial repetirá titularidad. Ha sido un fijo para Aguirre y ha mantenido la titularidad a pesar de los refuerzos en su posición (Pizzi, Torje y Lanzarote). Ha sido la primera temporada entera que ha jugado en la banda: el año pasado alternó la punta de ataque (con Pochettino) con la banda (tras la llegada de Aguirre). Sus características son las de un 9 puro: alto, buen juego aéreo y buen remate de balón. En la banda se ha descubierto una nueva faceta suya: la de luchador incansable.

Stuani ha jugado 34 partidos en Liga y ha marcado 6 goles, 1 menos que el curso pasado. Esos seis goles le han servido para ser el segundo máximo goleador del equipo por detrás de Sergio García, que marcó el doble.  De esos 34, 31 han sido enteros y se ha perdido dos por sanción. En Copa del Rey ha jugado los 4 partidos del equipo, 2 como titular y otros 2 como suplente. Esta temporada ha rendido peor que el año pasado: jugando más minutos, ha marcado menos goles y dado menos asistencias que el curso anterior. También ha recibido menos tarjetas amarillas, aunque se ha perdido dos partidos por acumulación y por una roja. Si bien es cierto que la aportación ofensiva ha disminuido, la principal virtud de Stuani es la defensa. Jugar con Stuani es jugar con dos laterales. El trabajo de desgaste y de contención del uruguayo ha sido notable, como también sus ayudas a Javi López. Tampoco se puede pedir más teniendo en cuenta el estilo de juego del equipo, muy conservador y con una excesiva dependencia de Sergio García.

Stuani puede desperdirse del Espanyol este mismo verano. La deuda económica con hacienda obliga al club a vender para poder invertir en fichajes de cara a la temporada que viene. Perarnau lo tendrá difícil: tiene que fichar entre 5 y 6 jugadores para formar un bloque competitivo que aguante al equipo en primera. De todos los jugadores de la plantilla, Stuani y Héctor Moreno son los que mejor cartel tienen: son mundialistas. De confirmarse su salida, el uruguayo se marcharía con 14 goles en su casillero y habiendo jugado un total de 72 partidos con la elástica blanquiazul. Las cifras no reflejan el rendimiento del futbolista: la presión y el trabajo defensivo no aparecen en los números.  

Competición Partidos Minutos Goles Tarjetas Amarillas
Liga BBVA 34 2573 6 9
Copa del Rey 4 205 1 1