Formado en las categorías inferiores del Terrassa, Abraham llegó al Espanyol procedente del Alcorcón para reforzar la medular del equipo blanquiazul. El futbolista catalán de 29 años tenía un reto difícil por delante: competir con Víctor Sánchez, Forlín y David López per un puesto en el once inicial. Sin ser un jugador indiscutible, Aguirre le dio confianza desde el primer día y, cuando ha jugado, lo ha hecho a un buen nivel.

En su primera temporada en el club, el 23 del Espanyol ha disputado un total de 1.621 minutos en los 27 encuentros que ha jugado entre Liga y Copa del Rey. A pesar de ser un jugador de corte defensivo, sólo ha visto tres tarjetas amarillas y no ha sido expulsado en ninguna ocasión. Como contrapartida, cabe destacar que todavía no ha logrado estrenarse como goleador con la camiseta blanquiazul.

Tras una primera temporada de toma de contacto, Abraham confía en seguir teniendo minutos y ser un jugador importante para el nuevo entrenador perico. Trabajador incansable, se ha ganado a la afición con su garra y entrega cada vez que salta al terreno de juego. El exjugador del Alcorcón, que tiene contrato hasta el 2016, es un seguro de vida para cualquier equipo gracias a su polivalencia, versatilidad, potencia y sacrificio.