Del inicio de temporada del Espanyol no se pueden sacar muchas conclusiones positivas. Los números hablan por si solos: tan solo se ha conseguido uno de los nueve puntos que se han jugado. Arriba, al equipo le falta pegada y depende demasiado de Sergio García. Aun así, las carencias más importantes se encuentran en defensa. En los tres partidos que se han disputado, el equipo ha recibido 6 goles. El diagnóstico es claro: falta contundencia y seguridad, tanto en situación de partido como en ocasiones a balón parado.

Uno de los integrantes de la defensa perica, Álvaro González, ha comparecido hoy ante los medios para analizar la situación en la que se encuentra el equipo catalán. El central, que no ha mostrado su mejor versión durante los últimos encuentros, admite los errores del equipo y confía en que no vuelvan a suceder: “Las imágenes hablan por si solas. Tenemos que corregir estos errores y empezar a dejar rivales atrás en la tabla”.

La necesidad de conseguir una victoria impera en el vestuario. En la rueda de prensa, Álvaro ha reconocido que “la preocupación tiene que existir porque aun no han sumado los tres puntos.” Para el futbolista, el próximo partido ante el Málaga puede tratarse de “una final” que les ayudaría a “coger confianza” y daría “cierta tranquilidad a la afición.”

Parece que el Power8 Stadium puede ser el escenario donde haya el punto de inflexión esperado, y los jugadores son conscientes de ello. El central admite que “de lo que tiene más ganas el equipo es que llegue el sábado para dedicar una victoria a la gente que se lo merece”.

Precisamente de los próximos rivales de los pericos ha hablado el jugador cántabro. "Tanto Málaga como Getafe son dos rivales que van a estar peleando por el mismo objetivo que nosotros, la permanencia. Ganar sería importantísimo”, ha dicho Álvaro.

Por último a una de las últimas incorporaciones españolistas se le ha preguntado acerca de las actuaciones arbitrales de los últimos partidos, especialmente ante el Valencia. Álvaro ha preferido no mojarse y se ha limitado a declarar que “son humanos y cometen errores, como ellos”. Aunque de momento la balanza ha perjudicado más a los pericos, el central desea que “lo que les quiten en unos partidos no se lo quiten en el resto que quedan”.