Joan Verdú ha vuelto a Cornellà a despedir a su amigo Sergio García. El mediapunta estuvo presente en la rueda de prensa de despedida que ofreció Sergio García y dijo que el Espanyol notará mucho la baja del capitán. "El Espanyol pierde medio equipo. Ha demostrado mucho, ha estado a un nivel altísimo". 

El mayor reto de la secretaría técnica a día de hoy es encontrar un sustituto para Sergio García. Verdú cree que hay dos maneras de sustituírlo: la primera pasa por incorporar a un jugador de un perfil parecido y la segunda por que sea el conjunto del equipo el que consiga suplir la baja del capitán. Ninguna de las dos serán fáciles.

Verdú vivió una experiencia similar hace dos temporadas, cuando se despidió de la afición para poner rumbo primero al Betis y después a los Emiratos Árabes Unidos después de bajar a Segunda. "Lo más importante es que la familia se amolde rápido". Y ha sido la familia uno de los principales motivos por los que Sergio deja el Espanyol: quiere ofrecerle un futuro mejor a sus hijos con el sueldo que le pagará el Al-Rayyan. 

Empezar de cero

La marcha de Sergio le obligará a adaptarse a un país nuevo, a una liga nueva y a una cultura nueva. "Todas las rutinas son diferentes, hay que respetar las horas de oración", apuntó Verdú, apoyándose en su experiencia en los Emiratos Árabes. "Hay menos presión y los enterenamientos son todos por la tarde", aunque, para Verdú, no deja de ser fútbol. 

El nivel deportivo de la liga de Catar es menor que el de Europa, aunque Verdú cree que Sergio se esforzará igual jugando para el Al Rayyan. "Sergio es competitivo, luchará por ganar partidos". También apuntó que Sergio se marcha a un equipo donde tendrá la opción de ganar títulos, algo contra lo que el Espanyol no puede competir.