Una vez más, Thievy Bifouma vuelve a ser noticia por algo no relacionado con lo deportivo. Un jugador de más sombras que luces, que ya sentenció su continuidad como periquito tras las declaraciones salidas de tono de su pareja sentimental el pasado verano. Fueron muchos los actos de indisciplina del franco-congoleño; salidas nocturnas, llegar tarde a los entrenamientos o desprecios hacia el club que le dio a conocer en la élite del fútbol español. Ahora, el enésimo incumplimiento de sus obligaciones ha llevado al club ha poner en marcha el código interno y sancionar al delantero.

Desaparecido

No hay que olvidar que, a día de hoy, Thievy todavía es jugador blanquiazul y que pese a disfrutar de un permiso temporal del club para llegar más tarde que el resto, debía cumplir con su obligación de unirse este jueves a sus compañeros, en una pretemporada que ya ha comenzado para la primera plantilla perica.

El club ha anunciado que sancionará económicamente al futbolista por incomparecencia a su lugar de trabajo. La cantidad se determinará -e irá aumentando- dependiendo de los días que tarde el jugador en volver con el equipo. Además, en su comunicado el Espanyol ha afirmado que no existe motivo alguno para que el futbolista no se haya presentado en Garòs (Vall d'Aran), donde el equipo se está ejercitando, o bien en la Ciudad Deportiva Dani Jarque.

Salida inminente

El ex de West Bromwich y Almería sigue buscando una salida inmediata del Espanyol, pero lo que parecía una operación fácil vuelve a convertirse en un culebrón veraniego. De momento, el jugador está sentenciado tanto para los aficionados como para el cuerpo técnico. Lo mejor de todo es que Thievy interesa a varios equipos, por esa razón el club intentará sacar el máximo dinero posible en su traspaso, y más tras conocer las últimas noticias sobre la necesidad de ingresos del club blanquiazul.