La situación de Cristian Gómez y Christian Alfonso en el Espanyol nunca ha sido fácil. En absoluto. Ambos llegaron de la mano procedente del CE Hospitalet en 2011, para, en principio, competir con el filial espanyolista, pero esa misma temporada dispusieron ya de minutos con el primer equipo periquito gracias a la oportunidad que les brindó el por aquel entonces técnico del Espanyol, Mauricio Pochettino.

Sin embargo, todo se les giró cuando el de Murphy fue destituido en diciembre de 2012 tras los malos resultados del equipo. Hasta entonces, ambos futbolistas estaban gozando de minutos e incluso de titularidades en el cuadro catalán pero, tras el cambio de entrenador, la situación cambió para peor. Llegó Aguirre y el mexicano tiró de la vieja guardia para salvar al equipo y con Sergio González apenas dispusieron de oportunidades. Un sinfín de cesiones temporada tras temporada era la solución para que ambos futbolistas no se vieran en el ostracismo dentro del Espanyol.

No obstante, este pasado 31 de agosto finalizó el mercado de fichajes y también la relación de Cristian Gómez y Christian Alfonso con el club espanyolista, puesto que los dos rescindieron su contrato con la entidad barcelonesa tras cuatro temporadas vinculados al Espanyol.

Cristian Gómez, por su parte, concedió una entrevista a Radio Marca en la que hizo un repaso a su estada en el Espanyol. Su llegada, su debut con Pochettino, su destitución, las pocas oportunidades con Aguirre, las cesiones a Real Madrid Castilla y Girona y las nulas oportunidades por parte de Sergio González: "En momentos clave, no diré que me superó la presión, pero supongo que después de una vida jugando en casa, encontrarme la presión de Primera División pesó un poco. Tampoco es excusa. El primer año iba bien, de titular, pero cuando se marchó Pochettino, se terminó y no lo llevé bien, no iba ni convocado. Aguirre era más conservador y a todos los jóvenes nos costó. No puedo recriminar nada porque no fui el único. Era lo que tocaba entonces y salió bien", apuntó Cristian Gómez en relación a su debut con Pochettino y a las pocas oportunidades que le brindó Javier Aguirre.

En el verano siguiente, salió cedido al Real Madrid Castilla, pero el hecho de que su salida se alargara debido a que Aguirre contaba con pocos efectivos en la medular del equipo, le hizo perderse una gran oportunidad: ir a la gira americana del Real Madrid en pretemporada. Tras esta frustración, le tocó vivir una situación incómoda en el filial del club de la capital: "En Madrid empecé jugando, muy contento, pero el equipo no arrancaba. Cambiaron el entrenador, subió el del C y confió en los que conocía. Da rabia porque tenía confianza. Quizá si me hubiera quedado en el Espanyol con Aguirre, habría tenido oportunidades. También hay que decir que lo que me decía a mí tampoco es lo que decía después en rueda de prensa; me dejó vendido ante la gente porque ante la prensa decía contar conmigo cuando una semana antes a mí me dijo que necesitaba cuatro meses para luchar por la titularidad, con lo que nos plantamos en enero. Pero no tengo ningún rencor ni a él ni a nadie, aparte de eso se portó bien y me trató muy bien, pero aquí no me gustó su actitud. Todos me han tratado bien en el Espanyol", afirmó el mediocentro catalán.

Esta temporada, ante el overbooking de mediocentros en la actual plantilla dirigida por el técnico Sergio González, Cristian Gómez no iba a tener ninguna oportunidad en el Espanyol: "Había dos motivos bastante claros, cuando marchas cedido tienes que hacer méritos para volver y ser de la primera plantilla, y en Girona no tuve la oportunidad, y si añades que aquí había mucha gente...desde el comienzo Sergio prefería otra gente y no puedo recriminarle nada, no pude hacer méritos en Girona, habiendo jugado poco tocaba callar y aceptar la decisión", apuntó resignado el ya exjugador del Espanyol.