Se avecina una nueva batalla en Cornellá. El Espanyol prepara toda su artillería para enfrentarse a una poderosa marea blanca. Un Real Madrid que parece que se acerca debilitado por un virus llamado FIFA y que no acaba de sentirse cómodo en el terreno de juego, pero con un objetivo muy claro, no fallar.

Al final de todas las batallas libradas en el nuevo territorio blanquiazul, siempre se ha acabado alzando la bandera blanca como símbolo de victoria. El Espanyol sin embargo, no está dispuesto a rendirse y quiere conseguir la primera victoria en el Power8 Stadium ante el Real Madrid, quiere demostrar que están preparados para resarcirse y dar un golpe sobre la mesa.

El duelo será duro, y el cuadro perico necesitará de toda la concentración posible para superar al Real Madrid. No se pueden permitir fallar en ningún aspecto. Las oportunidades que tengan delante del meta rival no podrán ser desperdiciadas y la zaga deberá mantenerse unida para no ser sorprendida por sus atacantes del nivel Cristiano Ronaldo o Benzema.

El Espanyol ya se enfrentó al Real Madrid en similares circunstancias. En las dos últimas ocasiones donde ambos conjuntos se vieron las caras en Barcelona y durante la tercera jornada acabaron con un resultado idéntico: 1-0 para los periquitos. Los blanquiazules se aferran al “no hay dos sin tres” y por tanto repetir una tercera vez, como las más próximas, esa victoria que significaría una buena dosis de confianza para toda la plantilla y seguir pues, escalando poco a poco hasta conseguir el objetivo prioritario lo antes posible, para después poder seguir soñando con la tan ansiada Europa League, la permanencia.

Sin embargo, el Espanyol no va a contar con dos de sus hombres más destacados. Hombres como Marco Asensio o Burgui no podrán participar en el duelo debido a la tan famosa cláusula del miedo que impone el Real Madrid a aquellos que deciden emprender un viaje temporal a otro equipo. Además la convocatoria del técnico Sergio González no ha dejado a nadie indiferente, jugadores como Diop o Hernán se quedan fuera y dan paso a algunos que parecían desaparecidos como Fuentes o dos de sus jóvenes promesas, Mamadou y Jordán.

En definitiva, este sábado se verán las caras dos escuadras que necesitan la victoria para ayudar a ir in crescendo, sobre todo a nivel de confianza y sensaciones respecto a ellos mismos y delante de la propia afición. Los dos primeros y únicos partidos de ambos conjuntos no han sido los mejores, y han dejado escapar puntos que no deberían.