El estadio del Espanyol inaugurado en 2009 se diseñó con la idea de explotar el espacio comercialmente para rentabilizar una instalación concebida, en teoría, para acoger un partido cada quince días de septiembre a mayo. La idea era –y sigue siendo– aprovechar la inversión del feudo para obtener ingresos extras.

Alquiler de espacios, organización de eventos, de torneos, etc. son algunas de las fuentes de ingresos que da el estadio a parte de los partidos del primer equipo.

Además, desde esta tarde, la pantalla gigante que presidirá el gol Prat será una nueva fuente de ingresos. Una manera más de explotar comercialmente el espacio.

La pantalla se inaugurará –abierto al público– este jueves a las 19h. Y a partir de ese momento, empezará a emitir anuncios comerciales y mensajes corporativos del club los siete días de la semana y las 24 horas del día.

Los mensajes que emita la pantalla podrán verse desde los aledaños del estadio y, además, desde una de las vías de acceso principales a Barcelona y al aeropuerto.

La instalación de la pantalla ha sido posible gracias al acuerdo con la empresa alemana Powerpixxel. Trabajan en el uso comercial de la tecnología LED y el acuerdo con el Espanyol es pionero en el país. La explotación de la instalación se llevará a cabo entre Powerpixxel y el club, asegurándose los pericos unos ingresos mínimos.

La pantalla tiene una dimensión de 176 metros cuadrados: ocho de altura por veintidós de ancho. Además, acorde con la naturaleza del estadio, la tecnología LED se caracteriza por su bajo consumo energético.

Los que no puedan asistir a la inauguración, el domingo los aficionados ya podrán disfrutarla con motivo del partido de liga que les enfrentará contra el Athletic de Bilbao a las doce del mediodía.