El Espanyol cuajó un mal partido frente a Las Palmas y se situó a cinco puntos del descenso. El equipo pasó la noche en la ciudad canaria y regresó a Barcelona el sábado. Nada más llegar a la ciudad condal, la plantilla se reunió durante más de media hora en el vestuario. Posteriormente, el equipo realizó un entreno para preparar el vital partido frente al Sevilla. En dicha reunión los blanquiazules hicieron autocrítica. Después del entrenamiento compareció ante los medios de comunicación el delantero titular frente a Las Palmas: Gerard Moreno.

El ariete blanquiazul fue muy contundente: "Hace cuatro jornadas nos pensábamos que estábamos salvados. Era una equivocación. Queríamos cerrar la permanencia lo antes posible y ahora nos hemos metido de lleno. En el próximo partido, frente al Sevilla, queremos certificar la permanencia".

Como es costumbre, el delantero catalán fue sustituido durante el partido. Cuando ésto sucedió, Gerard se asombró pues no entendía que tal y como iba el partido -que tenían que remontar-, el técnico decidiera sacar jugador por jugador, en vez de arriesgar y jugar con dos puntas. En la rueda de premsa, Gerard confesó que los jugadores tienen la misma sensación que las aficionados: "Estamos cómo está la gente: fastidiados. El partido del viernes fue muy malo, en concreto la segunda parte. Aún estamos pensando en el partido del viernes pero también sabemos que quedan tres partidos y que depende de nosotros". El delantero asegura que la plantilla le está dando vueltas a lo que sucedió en Las Palmas y que sólo la unidad sacará al equipo de esta situación: "Somos un grupo que habla mucho. El viernes hablábamos con todos: fisios, técnicos... Hay mucha comunicación. Tenemos que corregir errores. Tenemos que estar tranquilos sabiendo lo que nos jugamos porque si estamos en un estado de nervios, nos puede ir mal. Intentamos ayudarnos los unos a los otros".

Finalmente, el atacante blanquiazul reconoció que la presión la tienen todos los equipos y que espera que no les afecte: "Al final todos los equipos tienen presión. Cada uno tiene unos objetivos que cumplir.  Al final, en éstas tres jornadas, nos tenemos que alejar de todo lo que nos rodea. El partido del Sevilla es una final para nosotros. Tenemos que salir a muerte y que se note lo que nos jugamos. Que se note que éste club es muy grande. Sólo tenemos que pensar en este partido".