Importante victoria la lograda por el Barcelona en La Romareda. Los azulgranas querían seguir presionando al líder, pero la buena racha del Zaragoza –sumaba tres victorias consecutivas-, daba alas a los locales para pensar en vencer a los de Guardiola.

Tras la clasificación para semifinales de Champions y la semana que viene con partido intersemanal, Guardiola aprovechó para dar descanso a sus tres pilares en el centro del campo: Xavi, Iniesta y Busquets. Sus lugares los ocuparon Keita, Thiago y Fàbregas.

Tampoco estaba el exzaragocista Piqué, que no se recuperó a tiempo de la sobrecarga en el bíceps femoral, por lo que la pareja de centrales estuvo formada por Puyol y Mascherano, con Alves y Adriano por bandas y el tridente Alexis, Messi, Pedro arriba.

Por parte local, Manolo Jiménez, que ha logrado dar vida al equipo y mantener el sueño de la salvación, no pudo contar con Apoño, Luis García ni Mateos, pero, a pesar de las ausencias, los maños realizaron una primera parte casi impecable.

Al Barcelona le costó entrar en el partido. Casi toda la primera mitad estuvo trabada, sin ritmo y con una circulación de balón bastante lenta, debido al estado del césped, lo que no beneficiaba al juego azulgrana.

El primer acercamiento al área fue en el minuto uno, con un balón que se paseó por el área sin que nadie llegase a él. De ahí a la siguiente llegada con peligro del Barcelona tuvieron que pasar más de 15 minutos, y fue en un disparo de Messi que la defensa, muy atenta y bien posicionada, despejó a córner.

Aranda, protagonista

El Zaragoza también entrañó peligro con una internada y un centro al corazón del área que Aranda no logró rematar. La buena presión de los locales les permitía robar balones y salir al contraataque. Fue precisamente en un contragolpe donde llegó el que pudo haber sido el primero del partido. Valdés despejó un tiro de Aranda, el balón quedó suelto y llegó Lafita por detrás, lo que obligó al portero azulgrana a tirarse a por el cuero y acabar cometiendo penalti sobre el zaragocista.

Al no estar Apoño, que había sido el encargado de tirar los últimos penales en el equipo, fue Aranda el que se dispuso sobre la marca de los 11 metros. Lanzó el esférico al palo izquierdo del guardameta azulgrana, que adivinó perfectamente su intención y acabó parándolo, evitando así el 1-0.

El Zaragoza sintió cómo había desaprovechado una oportunidad de oro de adelantarse en el marcador y apretar al Barcelona. Sin embargo, Aranda pudo pronto resarcirse del fallo en el penal. Pablo metió un pase para el malagueño, que ganó la espalda a Mascherano, disparó, despejó Valdés y el rebote le volvió a caer al zaragocista, que esta vez no falló, de cabeza, para adelantar a su equipo.

Remontada en tres minutos

Poco le duró la alegría a los locales, que vieron cómo el Barcelona les remontó el resultado en apenas tres minutos. La igualada se fraguó con un remate de Alexis que despejó Roberto; el rechazo tampoco lo aprovechó Cesc, que sí consiguió un córner que fue botado por el propio Cesc. El meta local no llegó a atrapar el balón, que le cayó a Puyol y, tal y como le llegó, disparó de primeras para establecer la igualada en el marcador.

Aún no se habían repuesto del primer tanto cuando llegó el segundo. Fue en un contraataque del Barcelona que condujo por la derecha Alexis, quien asistió a Messi al otro costado. Este se zafó de la zaga y batió al meta zaragocista para darle la vuelta al marcador. Así, el ‘10’ azulgrana vio puerta en su octavo encuentro liguero consecutivo.

Descontrol

La primera parte murió con una última ocasión para los locales, a disparo de Lafita, que atrapó Valdés y con la expulsión de Abraham por doble amarilla. Tras el descanso, el Zaragoza siguió mordiendo y dispuso de las primeras oportunidades. Un taconazo del más que activo Aranda para Obradovic acabó con el esférico en el cielo de Zaragoza, mientras que un remate de Lafita se marchó por línea de fondo.

A la expulsión de Abaraham en la primera parte –que prácticamente no se notó en el campo, dado el gran trabajo del resto del equipo-, se unió la del entrenador del conjunto local, Manolo Jiménez, que enfiló el túnel de vestuarios nada más comenzar la segunda mitad.

El Barcelona aún no había cerrado el partido e intentaba sentenciar marcando el tanto de la tranquilidad. Fàbregas metió un pase al que no llegó Thiago, que se tiró con todo. Más tarde, un centro de Pedro fue sacado por Roberto. Otra más tuvo Alexis, que robó un balón, chutó y volvió a despejar el guardameta local. Ahí protestó Cesc, que esperaba completamente solo en el corazón del área.

Mientras tanto, se fueron moviendo los banquillos. Guardiola dio entrada a Busquets para poner orden en el centro del campo, y sacó a Keita. También hizo entrar más tarde al filial Montoya, al tener que irse Alves con problemas físicos. Por parte de los locales entraron Lanzaro y Postiga por Obradovic y Aranda, que disfrutó de las mejores ocasiones del Zaragoza.

Messi y Pedro sentencian

Siguió intentándolo el Barcelona, al que la defensa local no dejó hacer su juego. En una de las llegadas, Messi atrajo a cuatro defensas en una bonita jugada y abrió para Adriano, que puso un centro al que no llegó Cesc. El argentino tuvo otra más en una internada en la que Lanzaro, de forma limpia, le sacó el balón en el último momento. Una tercera tuvo el crack al quedarse solo ante el guardameta. Intentó picar el esférico, pero se le fue demasiado alto y salió por encima del travesaño.

El Barcelona suma 161 goles esta temporada, récord histórico

La sentencia no llegó hasta casi el final del encuentro, cuando Paredes le metió la rodilla a Alexis dentro del área, acción por la que el colegiado pitó penalti. No tardó Messi en coger el balón y disponerse a ejecutar la pena máxima, que lanzó arriba y al centro con un disparo fuerte para poner el 1-3 y sumar su 38º gol en Liga esta temporada. Pudo hacer el 'hat-trick' el argentino, que no acertó a definir tras interponerse un defensa.

Corría ya el tiempo de añadido cuando los de Guardiola dieron el último golpe, de nuevo en una jugada de contraataque, en la que Messi puso el centro para Pedro, que batió a Roberto para establecer el definitivo 1-4, y el que supone el tanto 161 del Barcelona esta temporada, récord histórico en el club.

Con este resultado, el Barcelona suma su novena victoria consecutiva en Liga y se sitúa, momentáneamente, a tres del Real Madrid, que mañana recibirá al Valencia. Asimismo, los azulgranas, que no han realizado su mejor partido, a pesar del abultado resultado, cortan una racha de tres victorias seguidas del Zaragoza, que se queda décimo octavo, con 28 puntos.

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